Ciudadanos venezolanos cruzaron a la frontera hacia Colombia para comprar víveres, artículos de primera necesidad y medicamentos que en su país no los pueden conseguir por los altos precios, o la escasez. Foto: EFE
Un estudio del Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM) afirma que la canasta básica del mes de julio requería de
2 043 083, 39 bolívares, lo que para entonces significaba, aproximadamente 22 salarios de un trabajador promedio.
El director del centro de investigación que se ha dedicado a dar seguimiento a este indicador, Oscar Meza, aseguró en una entrevista con Unión Radio que este monto, que equivale a unos USD 700 a una tasa promedio oficial, serviría “solo para cubrir lo esencial”.
Se trata, dijo, de una canasta básica “prácticamente de sobreviviencia para una familia trabajadora de cinco miembros”.
El aumento registrado en la canasta solo entre los meses de junio y julio es de 304 932,84, una diferencia que es incluso superior al sueldo de un trabajado durante todo un mes.
El salario mínimo de los trabajadores venezolanos es de 97 531 bolívares, lo que equivale a poco más de USD 30 en el mercado oficial.
Los venezolanos reciben además un bono obligatorio de alimentación de 153 000 bolívares, unos USD 50, pagados a través de una tarjeta que solo puede ser usada para comprar productos de la cesta básica.
Venezuela experimenta una de las peores crisis económicas de toda su historia, con elevadísimos niveles de desabastecimiento y de escasez, y aunque el Gobierno socialista ha mantenido ocultos los datos de inflación los economistas estiman que el indicador podría romper el techo de los tres dígitos.
Aunque el Gobierno de Nicolás Maduro ha aumentado ya en tres ocasiones el salario de los trabajadores en lo que va de año el ingreso promedio es insuficientes para cubrir el costo de la canasta básica actual en la que un kilo de carne cuesta alrededor de
29 000 bolívares, de café 39 000 bolívares, de queso 20 000 bolívares y de azúcar 14 000 bolívares.
Meza asegura que la inflación ha adquirido una variación “prácticamente diaria”, que sugiere que para agosto el precio de la canasta habrá escalado “probablemente a los 2 500 000 de bolívares”.
De acuerdo al informe al que se refiere Meza, actualmente se requieren de 68 103 bolívares diarios, lo que muestra “una inflación diaria que supera el 1%”.
Aunque las autoridades ha ocultado los datos de inflación del país desde hace más de un año, los economistas señalan que la de 2016 superó el 500 %, y que la de este año podría llegar al techo de las tres cifras.