Bruselas/Kiev/Moscú, DPA
Ucrania ampliará a partir de julio sus reservas de gas ruso para garantizar el abastecimiento a Europa el próximo invierno (boreal), anunció hoy en Kiev la jefa de gobierno ucraniana, Julia Timoshenko, citada por la agencia rusa Interfax.
Este mes comprarán gas ruso por valor de 250 millones de dólares (180 millones de euros) y el próximo por 1 000 millones de dólares, añadió. Los principales problemas para Ucrania siguen siendo las deudas internas de industrias y particulares, que ascienden a 2 450 millones de euros (3 430 millones de dólares).
Como Ucrania especuló con un descenso del precio del gas ruso, el consumo se cubrió en los últimos meses principalmente con las reservas propias. Pero en los fríos meses de invierno sólo podrá hacerse frente al aumento de la demanda con ayuda de más reservas.
El presidente ucraniano, Viktor Yushchenko, aseguró que hará todo lo posible para que el conflicto entre Kiev y Moscú no vuelva a conducir a cortes en el suministro a Europa.
Horas antes, en Bruselas, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, manifestó su preocupación por una posible escalada de la disputa por el gas entre Rusia y Ucrania, y ante ese temor, habló por teléfono con el primer ministro ruso, Vladimir Putin, y su homóloga Timoshenko.
“Debemos ponernos en el peor de los casos”, dijo Barroso al término de la cumbre de la Unión Europea (UE) que se celebra en la capital belga. Barroso dejó claro que “el gas ruso debe ser pagado”. “Se trata de una gran crisis”, señaló.
Por ello, habló también con el presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Khan, en busca de soluciones. Se baraja la posibilidad de celebrar un encuentro sobre la cuestión con representantes de la UE y organizaciones financieras internacionales.
Ucrania ha pedido a la UE un crédito de 4 200 millones de dólares (3 000 millones de euros) para evitar nuevos cortes del suministro de gas ruso. Rusia contempla participar en un eventual crédito sólo si se realiza con la UE.