Las playas de Atacames (foto) y Tonsupa han recibido a miles de turistas casi todos los días en este mes. Foto: Juan Carlos Pérez para EL COMERCIO
Las playas de Tonsupa, Atacames, Same y Mompiche, en Esmeraldas, registran una considerable afluencia de vacacionistas de la Sierra y de Colombia. Los cuatro destinos son los más visitados.
Entre la última semana de junio y julio llegaron 80 000 turistas a los cuatro balnearios. Es el balance que realiza Gioconda Triviño, directora de Turismo del Municipio de Atacames. En esa cifra están incluidos los turistas que ocupan los departamentos de los condominios de Tonsupa, quienes no llegaban masivamente desde hace un año.
El promedio de alojamiento en las tres primeras semanas de julio fue del 25 y 30% de la capacidad de la provincia (40 000 plazas). Hace un año, el promedio era 60%, especialmente los fines de semana.
Analía Ledesma, propietaria del hotel Puerto Ballesta, en Tonsupa, asegura que si bien hay una mayor actividad turística y hotelera frente a meses anteriores, no se compara con julio del 2017, cuando su hotel -con capacidad para 120 personas- tuvo más del 90% de ocupación.
“El año anterior tuvimos una facturación del doble a la fecha de hoy. Los problemas de la frontera ha incidido en la disminución; sin embargo, confiamos en que haya una recuperación en agosto”.
Una apreciación similar tiene Daniel Argüello, gerente del hotel El Marqués en Atacames. El hotel de 172 habitaciones fue ocupado entre un 30 y 40% de su capacidad. El año pasado estuvo sobre el 60% y en agosto fue del 100%.
Según el balance de la Cámara de Turismo de Atacames, la visita de colombianos incidió en un alto movimiento en las playas, junto con los que llegaron de Quito.
Los turistas de Atacames escogieron varias actividades de distracción, como el avistamiento de ballenas, el parasailing y los juegos acuáticos, según un reporte del gremio de los hoteleros.
La operadora turística Seathe-Súa indica que los turistas que llegaron a los balnearios del sur se inclinaron por el avistamiento de ballenas jorobadas, pese a contar con una opción más, como es la visita a las áreas de manglar.
A través de esa operadora se ofrecen paquetes turísticos que incluyen recorridos a la zona rural de Atacames para visitar las cascadas y gastronomía típica, otras alternativas para la distracción.
Otros eligieron Same por la tranquilidad y la seguridad que los empresarios han implementado por iniciativa propia; por ejemplo, han contratado seguridad privada para los viajeros nacionales e internacionales que gustan de esa playa y de Tonchigüe.
A Mompiche fueron los amantes de surf y la playa de arena negra, porque es donde se presentan las olas más grandes para ese deporte; esa actividad es practicada en un 70% por los extranjeros que llegan a vacacionar todos los años por esta época, en especial estadounidenses, brasileños y argentinos.
Para agosto, la Cámara de Turismo de Atacames calcula un promedio de visitas del 60% en los 400 hoteles de Atacames. Esperan un movimiento de USD 36 millones, con un promedio de gasto por turista de USD 50 diarios.
Ese valor comprende el pasaje de transporte, hospedaje, tres comidas diarias y un coctel, explica Sara Moyano, presidenta de la Cámara.
Paola Guzmán, presidenta de la Asociación de Hoteleros de Atacames, cree que la presencia de turistas se debe a las campañas de promoción que han hecho en conjunto con el Ministerio de Turismo.
Precisamente, ella estuvo toda la semana pasada en Quito para invitar a los quiteños a viajar a Atacames, a través de radios y medios televisivos.
Para recibirlos, hoy tienen previsto hacer el festival del bolón más grande del mundo. Será a las 08:00, en el malecón de Atacames.
Esta es una iniciativa del sector privado -dice- que busca retomar la afluencia de turistas a las playas del sur de la provincia, durante las vacaciones de la Sierra y el feriado por el 10 de Agosto.