El virus ha tenido más incidencia en personas de 20 a 49 años, población en la cual no se ha priorizado en las vacunaciones gratuitas. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
El fallecimiento de una mujer atrajo la atención de las autoridades del Ministerio de Salud de Tungurahua.
Se dio el 13 de mayo pasado. La mujer tenía 47 años. Murió con un cuadro respiratorio grave, el cual pudo haberse complicado por la presencia del virus de la gripe AH1N1.
Según Mónica Villegas, funcionaria del Distrito de Salud 2, hasta ayer se realizaban todos los análisis del caso sobre ese virus, que hasta el momento ha dejado 39 fallecidos en
el Ecuador.
Solo en Tungurahua se han dado tres decesos, hay otros tres sospechosos y el caso de la mujer de 47 años que está por confirmarse.
El AH1N1 agrava la condición de los pacientes que tienen enfermedades preexistentes. Más si se trata de males graves como la diabetes u otro mal considerado crónico.
Sobre los casos sospechosos,Villegas aclaró que se encuentran bajo observación, pero que hasta ahora su estado es favorable. Hay un protocolo médico que se aplica a las personas cuando tienen síntomas de AH1N1, es decir: fiebre mayor a 38 grados, tos, dolor de garganta, entre otros.
En las unidades de salud se han instalado salas de triaje
para identificar los posibles casos. Si hay casos positivos, los pacientes son aislados, si se encuentran de gravedad.
Cuando no hay contratiempos y el tratamiento con medicamentos hace efecto, los pacientes son vacunados y luego pueden volver a sus actividades cotidianas.
El primer paciente con la gripe AH1N1 de Tungurahua fue derivado de una casa de salud de Latacunga (Cotopaxi) al Hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) de Ambato, según las autoridades locales.
Se trató de un hombre de 52 años, que presentaba un cuadro severo de neumonía. También se registró el fallecimiento de una mujer de 32 años, de la parroquia Santa Rosa, y la de un hombre de 72 años que arribó de Quito a la capital de Tungurahua.
Lira Villalva, gobernadora de Tungurahua, convocó ayer a una rueda de prensa para abordar el tema. Rechazó una publicación local en la que se dijo que no existía medicación suficiente para tratar a los pacientes con el virus.
“Estamos ampliando el espacio de aislamiento para los pacientes que presenten el virus en el hospital. No hay faltantes en medicamentos en los centro de salud de la provincia”, aseguró Villalva.
En Quito también se aseguró que existe la medicación necesaria para los pacientes identificados. Solo en la Unidad de Infectología del Hospital Carlos Andrade Marín se presentaron esta semana 15 pacientes hospitalizados.
Hasta ahora, el virus ha tenido más incidencia en personas de 20 a 49 años. Es la población que no se ha priorizado en las vacunaciones gratuitas, porque son personas que poseen más defensas.