Las pruebas de uno de los trenes sobre rieles se realizan desde la estación de El Labrador hasta Iñaquito. Profesionales ecuatorianos lo operan. Foto: Cortesía Metro de Quito
Los tres primeros trenes que llegaron a Quito, entre septiembre del 2018 y este año, que forman parte del Metro, empezaron a ser probados. Uno de ellos, el que llegó a la estación de El Labrador, inició el recorrido sobre los rieles y estrenó un tramo del túnel de 22 kilómetros que está construido en su totalidad.
Los videos de esos primeros trayectos se hicieron virales en redes sociales. Muestran a uno de los trenes (de seis vagones), pintado de blanco con montañas rojas y azules, de 109 metros de largo, recorriendo un sentido de los rieles.
El túnel es lo suficientemente ancho para que a la vez circulen dos trenes, uno de ida y otro de regreso. Uno de los videos muestra el panel de control de la cabina principal, donde se sienta el operador, y la velocidad que alcanzará el tren. Se calcula que circule a 40 km por hora, aunque tiene capacidad para alcanzar los 100 km/h.
La cabina de mando de los trenes está equipada con pantallas LED y sistemas con la más alta tecnología para dar información a los operadores en tiempo real.
Las primeras pruebas se hicieron solo en un tramo, desde el fondo de saco ubicado en El Labrador hasta la Estación Iñaquito. No hace falta que el tren gire luego de llegar a su destino. De los seis vagones, el primero y el último funcionan como cabina de mando, de modo que cuando llega a su destino final, se activa la cabina del lado contrario y el tren avanza en la dirección opuesta.
La Empresa Pública Metropolitana Metro de Quito informó que las primeras pruebas dinámicas sobre los rieles del tren consistieron, principalmente, en verificar el acople y rodaje de los seis vagones. También se pusieron a prueba el acondicionamiento de los implementos y equipos de seguridad.
A diferencia de las primeras pruebas realizadas en talleres y cocheras, en el sector de Quitumbe, estas se realizaron ya sobre rieles electrificados, constituyendo un primer desplazamiento real del tren en el túnel. Estas fases de prueba contaron ya con sus dos primeros operarios Lenin Paucar y Javier Vilaña, ambos quiteños expertos en electrónica, quienes recibieron capacitación en ciudades españolas.
Paralelamente, los trabajos en el Metro continúan. Actualmente se colocan los últimos tramos de los rieles. En total, la obra tiene un avance del 80%. También se instalan acabados y elementos decorativos en las 15 estaciones. Según Metro de Quito, las obras están en etapa final y se cumple con los cronogramas y presupuestos establecidos.
Cada estación tiene un color para que los usuarios se familiaricen al subirse o bajarse y puedan ubicarse de mejor manera. Hay estaciones donde predominan el amarillo, azul o verde. Las paradas blancas, por ejemplo, son aquellas que servirán de conexión con el Trolebús o la Ecovía.
El costo del proyecto ha sido financiado por organismos multilaterales, como el Banco Mundial, BID, CAF, Banco Europeo de Inversiones. El último tramo de financiamiento de USD 330 millones fue posible gracias al Banco Mundial, CAF y BID. Se aspira a que a finales de marzo lleguen dos trenes adicionales, hasta completar los 18 que formarán parte del sistema. Se prevé que el Metro opere desde diciembre.