Los padres de Charlie Gard a su salida del Tribunal Superior de Londres (Reino Unido), el 10 de julio de 2017, que atenderá el caso de su hijo de 11 meses, que tiene una enfermedad congénita terminal, para que evalúe unas nuevas pruebas médicas a fin de que el pequeño sea tratado en Estados Unidos. Foto: EFE
Un nuevo tratamiento experimental en el que participan científicos españoles ha vuelto a dar esperanzas a los padres del bebé británico Charlie Gard, cuyo caso regresó, el lunes 10 de julio del 2017, al Tribunal Supremo de Reino Unido con una vista oral.
El juez que preside el tribunal dijo que evaluará la nueva evidencia el jueves y que después de eso podría estar preparado para emitir un fallo al respecto.
La repercusión mediática, sumada a las declaraciones del papa Francisco y Donald Trump, han salvado “de momento” la vida al pequeño, dijo su madre a la BBC antes de la audiencia de este lunes.
Charlie, de 11 meses, sufre según los médicos una enfermedad genética degenerativa que le ha provocado un daño cerebral irreparable. Para evitar su sufrimiento, y en contra de la voluntad de los padres, la Justicia ordenó la desconexión de los medios que lo mantienen con vida.
Los padres del bebé querían probar una terapia experimental en Estados Unidos, pero hasta ahora habían fracasado en su intento ante todas las instancias judiciales.
Charlie iba a ser desconectado el viernes en el hospital Great Ormond Street de Londres, pero ese día la clínica informó de nuevas evidencias sobre un tratamiento experimental por parte de dos hospitales.
Según el diario “Daily Mail”, se trata de una carta firmada por médicos de Reino Unido, Italia, Estados Unidos y España (Instituto de Investigación de Vall d’Hebron, en Barcelona) en la que informan de estas nuevas evidencias que ahora valorará el Tribunal Supremo.
“Acabamos de tener evidencia de que el tratamiento experimental (…) puede llegar al líquido cefalorraquídeo, por lo que cabe una posibilidad de que funcione y que el estado del pequeño pudiera mejorar”, señaló el químico español Ramon Martí al diario “La Vanguardia”.
El domingo, los padres de Charlie, Chris Gard y Connie Yates presentaron al hospital una petición con casi 400 000 firmas en las que instaban a los médicos a permitir que su hijo fuera tratado en Estados Unidos.