El pasado jueves (12 de mayo del 2016) la Asamblea aprobó la Ley Solidaria por el Terremoto. Durante la sesión, y sin haberse discutido con anterioridad, el legislador Vethowen Chica propuso una transitoria sobre el dinero electrónico.
El texto, que fue incluido por la Asamblea, establece que el Banco Central del Ecuador (BCE) subsidie, por 12 meses, la implementación de cualquier mecanismo de interconexión con la plataforma de dinero electrónico de acuerdo a los límites y condiciones que establezca la Junta de Regulación Monetaria y Financiera.
Sin embargo, el texto incluyó también que durante ese año no regirán las limitaciones del Código sobre el BCE.
Esta decisión generó sorpresa en el presidente de la Asociación de Bancos Privados del Ecuador (ABPE), Julio José Prado. “Nos toma por sorpresa la inclusión del dinero electrónico y del resto de la transitoria. No la tuvimos presente en ninguno de los debates ni hubo la intención de comunicar. Todavía no sabemos el alcance”.
Luis Espinosa Goded, catedrático de la Universidad San Francisco, también cuestiona el hecho de que el tema se haya incluido a última hora y en un proyecto cuya materia está relacionada con mecanismos para apoyar a las áreas impactadas por el terremoto.
Cataloga de “asalto a la legalidad” el inciso sobre el BCE y se pregunta si al eliminarse las restricciones se podría llegar a la emisión inorgánica a través del dinero electrónico. Recordó, además, que las autoridades siempre han indicado que este mecanismo está respaldado uno a uno: un dólar físico por uno en dinero electrónico.
La lectura de este analista es que a través de la transitoria no se está aplicando ninguna limitación en materia de dinero electrónico para el BCE. “Yo fui contrario al Código Monetario, pero era una norma legal (…). Sin embargo, ahora puede (ndlr: esta nueva norma) servir para emitir dinero de manera inorgánica, para obligar a su aceptación, etc.”.
Desde los bancos hay más cautela. La ABPE espera una ratificación o veto del texto para acercarse a la Junta Bancaria y pedir explicación sobre el tema.
Es posible que -según el sector- la norma busque impulsar la coparticipación de las cooperativas y otras entidades financieras en las plataformas de dinero electrónico que maneja el BCE. Prado explicó que esto lo prohíbe el Código y se estaría dejando la puerta abierta para hacerlo. Aún así considera que el alcance de la transitoria es muy amplio y eso genera dudas en el gremio.
“Nosotros como asociación de bancos no vamos a participar en nada que vaya a generar incertidumbre en los depositantes. Creemos que la forma en la que se plantea el dinero electrónico, aún peor con esta transitoria, no genera condiciones de confianza y certidumbre”, puntualizó.
Otra duda que surge es sobre cuáles son las restricciones que se eliminan, sin son en general o solo sobre el dinero electrónico.
Los banqueros, por ahora, no quieren adelantarse y esperarán información específica sobre el objetivo real de este mecanismo.
Este Diario consultó al Banco Central sobre el tema, sin embargo, hasta el cierre de la edición no hubo respuesta. El único dato oficial es que el dio el asambleísta Chica durante el segundo debate del proyecto de Ley.
Allí señaló que desde el oficialismo se busca incentivar el uso del dinero electrónico y que por eso también propuso que se cobre un impuesto al valor agregado del 10% en las transacciones hechas con este mecanismo, “que es más ágil, más oportuno, más rápido, no cuesta reponer la moneda dañada. No nos cuesta nada. La otra moneda (los dólares físicos) los tenemos que comprar a la Reserva Federal de EE.UU.”.
Para este legislador, el uso del dinero electrónico va a dinamizar la economía. Explicó que este mecanismo sí tiene respaldo en dólares y que el Gobierno busca agilitar la participación de las cooperativas en el sistema.
“Se va a incluir a las cooperativas para que el dinero electrónico sea real (…)” dijo e insistió en que, para que no exista especulación, siempre habrá un soporte en dinero en efectivo.