Trabajadoras sexuales permanecerán en la esquina de la iglesia Santo Domingo, según dicen

Las trabajadoras sexuales, que se ubican en la Plaza de Santo Domingo, dijeron que volverán a ese lugar luego de que el Municipio no hallara un lugar para reubicarlas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

Las trabajadoras sexuales, que se ubican en la Plaza de Santo Domingo, dijeron que volverán a ese lugar luego de que el Municipio no hallara un lugar para reubicarlas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

Las trabajadoras sexuales, que se ubican en la Plaza de Santo Domingo, dijeron que volverán a ese lugar luego de que el Municipio no hallara un lugar para reubicarlas. Foto: Archivo/ EL COMERCIO

Preocupada. Así dice sentirse Nelly Hernández, dirigente de 48 trabajadoras sexuales de la Plaza de Santo Domingo.
Todo ante la negativa de los moradores de La Loma de aceptar una reubicación temporal de estas mujeres en el exhotel Guayaquil, de las calles Paredes y Maldonado.

Hernández señaló: “otra vez nos quedamos sin un lugar donde trabajar. Y no tenemos otra alternativa más, así que nos quedaremos en la esquina de la Plaza de Santo Domingo".

Según la dirigente se les pidió que se ubicaran en el exhotel Guayaquil solo a las 48 mujeres de la Asociación de la Plaza de Santo Domingo. De ninguna manera al resto de trabajadoras sexuales del Centro Histórico; es decir, a las 48 mujeres del bulevar de la 24 de Mayo y 136 de la Plaza del Teatro.

Sin embargo, la dirigente asegura que este problema debe solucionarlo al Municipio. Y garantizar los derechos de los vecinos y de las trabajadoras sexuales. "Él (se refiere al administrador de la Zona Centro, Jofre Echeverría) tiene que solucionar esto, no los vecinos ni las trabajadoras".

Y todo porque, como dice Hernández, "no es posible que nos enfrentemos con los vecinos. El Municipio debe ser el mediador entre nosotras y los vecinos".

Pero “si no tienen información correcta, ningún morador va a querer una casa de cita, entre comillas, en su barrio. Hay que comprender que casa de cita es donde se vende incluso licor, y en ningún caso haríamos eso en el hotel de un barrio".

Durante diciembre, las mujeres plantean una tregua y resistirán porque aún no les han ofrecido un lugar para reubicarse. Es decir, permanecerán en la esquina de las calles Rocafuerte y Guayaquil, así deban caminar cinco o 10 cuadras en busca de un hotel para poder trabajar. Así estarán, dice Hernández, hasta que el Municipio les señale una calle.

En enero del 2016 analizarán qué medidas adoptarán, "ahora queremos pasar la Navidad y el Fin de Año y caminar lo que se tenga que caminar en busca de un hotel y trabajar", acota Hernández.

Finalmente dice que si los vecinos tienen derecho a manifestarse, ellas tienen derecho a hacer resistencia y no abandonar su lugar de trabajo que han ocupado durante años. Esto en relación a la protesta realizada la mañana de este lunes 30 de noviembre del 2015 por moradores de la Loma Grande.

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