Todd Chapman se reunió con el canciller Ricardo Patiño, quien lo recibió en el Ministerio de Relaciones Exteriores. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Todd Chapman presentó hoy, 17 de febrero, las copias de sus Cartas Credenciales al canciller Ricardo Patiño, quien lo recibió en el Ministerio de Relaciones Exteriores. Chapman es así oficialmente el nuevo embajador de Estados Unidos ante el Gobierno ecuatoriano.
En la parte pública del encuentro que duró pocos minutos ambos se saludaron estrechándose las manos y posaron para las fotos. El resto de la reunión fue a puerta cerrada.
Chapman llegó a Quito hace dos semanas y se ha dedicado a visitar algunos sitios turísticos, como el Centro Histórico y Mindo. El nuevo embajador cuenta con más de 25 años de carrera diplomática y domina el español, chino y portugués.
Antes de su nombramiento Chapman trabajó en misiones diplomáticas, fue Subsecretario Brasil, Afganistán, Mozambique, Bolivia, Costa Rica, Nigeria y Taiwán. Y trabajó para la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental y fue Adjunto de Asuntos Políticos y Militares en el Departamento de Estado. Pero esta es su primera posición como titular de una embajada.
Durante el gobierno del presidente Rafael Correa, el Gobierno norteamericano ha tenido tres representantes en Quito, antes. La primera fue Linda Jewell, quien ocupaba el cargo cuando el Mandatario llegó a Carondelet. Fue embajadora desde mediados de 2005 hasta julio de 2008.
En octubre de 2008 la reemplazó Heather Hodges, quien estuvo al mando de la Embajada hasta abril de 2011. Entonces fue declarada persona non grata por el Gobierno y expulsada del país. El motivo fue la publicación de unos cables diplomáticos de 2009, por Wikileaks. En esos documentos la Embajada en Quito afirmaba supuestamente que “la corrupción es generalizada en las filas de la Policía” ecuatoriana y que dichas actividades eran tan conocidas que “algunos funcionarios de la Embajada (de EE.UU.) creen que el presidente (Rafael) Correa debió haberlas conocido cuando le nombró (a Jaime Hurtado Vaca). Estos observadores creen que Correa puede haber querido un jefe de policía al que pudiera manipular fácilmente”.
En ese momento las relaciones bilaterales se pusieron tensas y ambos Gobiernos retiraron a sus embajadores y, durante 13 meses, solo mantuvieron el contacto a nivel de agregados comerciales. En mayo de 2012 después de que se nombraron nuevos embajadores, llegó Adam Namm a Quito.
En su período también hubo algunos roces con el Gobierno, el presidente Correa le pidió en varias ocasiones que no “sea metidito” y no se involucre en la política nacional y respete la soberanía, especialmente cuando Namm declaraba su respaldo a la libertad de expresión. El diplomático dejó la embajada en octubre pasado.