El temblor que se produjo en Guayas también fue sentido en Manabí, el Austro y la Sierra centro andina de Ecuador.
En Manabí, el sismo fue sentido a las 06:19. Quienes habitan en los edificios de apartamentos ubicados en el acantilado sobre playa Murciélago, en el cantón Manta, fueron los primeros en salir a las calles. El remezón fue tan fuerte que hasta algunos huéspedes que se alojaban en hoteles de más de tres pisos también salieron asustados.
Cuando las autoridades del Inocar descartaron un posible tsunami, los habitantes recobraron la calma. Muchos estaban atentos a los noticieros de radio y televisión. Mario Vélez trabaja en playa Tarqui, en la limpieza de pescado: “Aquí lo sentimos fuerte, las mesas de trabajo traquetearon”.
En el Austro del país, el sismo se sintió en Azuay, Cañar y Loja. En la capital azuaya, usuarios de redes sociales reportaron que el movimiento telúrico se sintió en edificios del centro y en la zona sur de la urbe.
El Sistema ECU-911 Austro no recibió reportes de incidentes y con su sistema de cámaras de seguridad hizo un monitoreo para descartar daños en las estructuras.
Aunque el sismo no trajo consecuencias, el director del ECU-911, Fernando Figueroa, dijo que estos eventos son una alerta para que la ciudadanía se prepare ante posibles fenómenos naturales.
En Tungurahua, el temblor no provocó daños materiales ni pérdidas humanas, pero sí alarmó a varias personas que salieron a los parques y patios de sus viviendas en Ambato.
Marcelo Viera, vecino de la ciudadela Presidencial, con sus dos hijos se dirigió hasta las canchas del sector. “El temblor fue fuerte, salí porque pensé que podía haber una réplica”.
La central del Sistema de Seguridad ECU 911 recibió varias llamadas de Píllaro, Baños y Ambato reportando que se sintió el movimiento telúrico. “No hubo llamadas de emergencia por esta causa. Las vías están habilitadas”, dijo Ángela Fonseca, encargada de comunicaciones del ECU 911 en la Zona 3 de Tungurahua.