Ministro de Asuntos Exteriores español y Comisario europeo designado como Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, español, Josep Borrell durante el inicio de la conferencia internacional de solidaridad sobre el refugiado venezolano y crisis migratoria en Bruselas, Bélgica, 28 de octubre de 2019. Foto: EFE
La críticas al presidente venezolano, Nicolás Maduro, y al bloqueo político en el país se invitaron este martes 29 de octubre del 2019 a la conferencia internacional centrada en cómo apoyar a los países de América Latina a afrontar la crisis de migrantes venezolanos.
“La crisis humanitaria tiene nombre y apellidos: Nicolás Maduro”, responsable del “grupo de desplazados más grande del mundo”, sentenció el canciller de Perú, Gustavo Meza-Cuadrada, al inicio del segundo día de conferencia en Bruselas.
Unos 4,5 millones de venezolanos huyeron de la crisis política y económica que vive su país. En un 80% de los casos fueron a países vecinos, y la comunidad internacional debate cómo ayudar a estas naciones en esta cumbre convocada por la Unión Europea (UE) y la ONU.
Y todo ello consciente de que la crisis migratoria, que afecta principalmente a Colombia, Perú o Ecuador, se agrava. El enviado especial de la ONU Eduardo Stein proyectó el lunes en 6,5 millones el número de migrantes para 2020.
Varios de los participantes en la segunda jornada, iniciada con las intervenciones de Meza-Cuadrada y su par ecuatoriano, José Valencia, resaltaron que sin una solución a la crisis política dentro de Venezuela, la migración continuará.
Filipo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) durante el inicio de la conferencia internacional de solidaridad sobre la crisis de refugiados y migrantes venezolanos en Bruselas, Bélgica, 28 de octubre de 2019. Foto: EFE
La “grave crisis humanitaria” tiene “una causa política”, es por “un bloqueo político”, apuntó el canciller portugués, Augusto Santos Silva, llamando a una salida “política, pacífica, democrática” a través de elecciones.
En un momento en que las negociaciones auspiciadas por Noruega entre el gobierno de Maduro y la oposición liderada por Juan Guaidó están en punto muerto, algunos participantes llamaron a ambas partes a reanudarlas para una salida “lo antes posible”.
Aunque el evento, al que no se invitó a las autoridades venezolanas, no busca recaudar fondos, no se descarta que algunos países pongan cifras a su ayuda, como España, que ya anunció 50 millones de euros en tres años.
Stein estimó el lunes en USD 1 350 millones el monto necesario en 2020 para atender a 4,3 millones de venezolanos establecidos en 17 países, cifra que multiplica por dos un llamado anterior de diciembre de 2018, del que logró recaudarse por el momento la mitad.