Redacción Quito
quito@elcomercio.com
En La Marín, en El Pintado, en Las Cinco Esquinas, en Solanda, en El Comité del Pueblo… todavía hay comercio informal en las aceras y vías. Este es uno de los temas pendientes para la administración de Augusto Barrera.
Las fechas claves
El 26 de marzo de este año, los comerciantes informales firmaron un acuerdo para que el entonces candidato Augusto Barrera apoye al gremio.
En esa misma cita también participó Gustavo Baroja, entonces candidato a Prefecto. Ambos representando al movimiento político Alianza País.
El 19 de agosto los comerciantes informales organizaron su X Congreso. Luego de una marcha, conversaron con Barrera y se conformaron las comisiones.
El 19 de noviembre es la fecha prevista por los vendedores para reunirse por segunda ocasión con el Burgomaestre.La falta de soluciones hizo que la Federación de Comerciantes Minoristas de Pichincha (Fedecomip) solicitara una audiencia con el Alcalde para el próximo 19 de este mes, a las 11:00.
El 19 de agosto, 19 días después de la posesión de Barrera, en el salón del Concejo se resolvió organizar comisiones del Municipio y de los comerciantes minoristas. El propósito fue tomar medidas para mejorar las condiciones de trabajo de las 67 Asociaciones de la entidad. También empezar la ejecución de proyectos para la recuperación de centros comerciales y agrupar a los minoristas.
En la solicitud (oficio 189) que hace la Fedecomip para que el Alcalde los reciba, se detalla lo realizado 82 días después del primer diálogo entre Barrera y los comerciantes.
En una ayuda memoria de cinco hojas se explican los problemas que tiene el Distrito en las 75 zonas donde se realiza comercio informal. Cada problema fue planteado con su respectiva solución.
Sin embargo, Carlos Castellanos, presidente de Fedecomip, dice que apenas se ha logrado avanzar en un 20 % de las propuestas. La única gestión hecha entre ambas partes ha sido un reconocimiento y verificación de los sitios donde están los comerciantes.
En el oficio, además, se detallan los resultados de las reuniones y se explica que hay “un desconocimiento de los temas problemáticos en cada una de las zonas”. Se agrega que existe debilidad en la gestión administrativa para acoger las soluciones planteadas por Fedecomip.
La falta de respuestas por parte del Municipio genera descontento entre los dirigentes de los comerciantes. Por ejemplo, Gloria Cruz, presidenta del Comité del Pueblo, entregó al Alcalde una copia del proyecto para la construcción de un Centro Comercial Popular de tres plantas.
Pero Cruz está decepcionada. No tiene ninguna respuesta y el plan para mejorar el aspecto de su zona sigue estancado. “En el Comité continúa el desorden de las ventas en las calles. No hay respuestas del Municipio”.
Manuel Tituaña, vendedor de películas en el playón de La Marín, también cree que participó en la marcha hacia el Municipio en vano y se queja porque sus condiciones de trabajo siguen iguales, como hace ocho años cuando llegó desde Cuenca.
Aunque Tituaña no entró al edificio, escuchó a Barrera que ayudaría a terminar el centro comercial en La Marín. “No ha pasado nada. Seguimos igual que antes. Hasta hay más vendedores en las calles”.
Norma Simbaña, vendedora de bisutería, coincide en que la gestión de obras para los comerciantes minoristas solo ha quedado en papeles y en palabras. Ella vende en la calle Michelena (El Pintado). En este sitio, como hace varios años, se siguen instalando los cubículos con plásticos donde se ofertan peluches, ropa, collares, grabadoras…
Castellanos asegura que todavía confían en el acuerdo firmado por el Burgomaestre, cuando Barrera fue candidato al sillón municipal por el movimiento Alianza País en marzo pasado.
No obstante, en la primera reunión Barrera ratificó su convicción de apoyar al gremio. “No hemos hecho un discurso antes y uno después. Eso no va a ocurrir. Estamos curados de espanto de esa vieja política del doble discurso”, dijo Barrera en su elocuente intervención.
La Fedecomip, llegará a la segunda reunión con pedidos concretos, según Castellanos. Serán varios, entre ellos se exigirá que los proyectos de mejoras en los mercados de la ciudad avancen más rápidamente.
Asimismo, esperan un pronunciamiento oficial de Barrera en torno al debate de la Ley del Comerciante Minorista que se analiza actualmente en la Asamblea Nacional.
Otras de las exigencias de los comerciantes es que el Municipio también respete los acuerdos firmados en la anterior administración. “Fueron convenios institucionales y no personales”, concluye Castellanos.