Flores afuera de la tienda donde una mujer fue asesinada. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Un lazo negro y flores fueron colocados en la puerta de la tienda en donde una mujer fue asesinada la tarde del sábado, 30 de junio del 2018, en La Floresta, centro – norte de Quito. Los vecinos de allí continúan consternados por lo sucedido.
La Policía Nacional informó que el crimen se produjo aproximadamente a las 16:20 del sábado. El capitán Marco Terán, oficial del Circuito La Mariscal, manifestó que la víctima tenía 49 años y se encontraba dentro del local con otras personas cuando la atacaron.
“Tiene varios de cortes con arma blanca”, precisó el uniformado. “No parece que fue un robo, porque la señora tiene todas las pertenencias”. El arma con el que se perpetró el asesinato –acotó Terán- fue hallada al interior del local.
Una joven encontró a la víctima al interior del establecimiento comercial. Contó que el piso estaba ensangrentado y la fallecida detrás del mostrador. En ese instante reportó la emergencia al ECU 911.
Las pesquisas continuaron el domingo. Un grupo de agentes vestidos de civil acudió al sitio para dialogar con la gente y recabar más evidencias.
Para una de las dirigentes que integran el Comité de Seguridad de La Floresta, lo ocurrido el sábado los ha unido como vecinos. Ahora, buscan nuevas estrategias para fortalecer la seguridad en el barrio. “Para este sábado 7 de junio fuimos convocados en la casa parroquial para elegir un nuevo comité”.
Una vez que se posesione la nueva directiva se analizarán las nuevas estrategias. Por ejemplo, organizar un plantón u otra actividad para pedir más seguridad.
Se quejó de que los atracos a transeúntes son recurrentes, así como los robos de vehículos y sus piezas. También en las viviendas por la noche. A esto se suma que hacen falta más patrullajes. “Les llaman como refuerzos a La Mariscal y la gente de La Floresta nos quedamos sin patrullajes”.
Los moradores pidieron que haya más controles a los centros de diversión nocturna que funcionan en la zona. Otra vecina indicó que, desde hace cinco años, la inseguridad es constante. “No tenemos vigilancia policial”.
Recordó que hace un año aproximadamente hubo otro asesinato a plena luz del día cuando desconocidos le dispararon a un transeúnte cerca del parque José Gabriel Navarro, más conocido como ‘Del Relleno’.
Ante las quejas de los moradores, el mayor Carlos Endara, jefe subrogante del Circuito La Mariscal, manifestó que los patrullajes son permanentes allí. Incluso se abarca las zonas de mayor flujo de personas como las inmediaciones de las universidades Católica, Politécnica y Salesiana.
“Hemos destinado un patrullero móvil, el mismo que cuenta con oficina y pasa estacionado en la zona donde hay mayor conflictividad”, precisó el oficial. Además se realizan análisis delictuales cada semana de las zonas más conflictivas sin descuidar otros puntos. En ese sentido, “en La Floresta tenemos los índices delincuenciales más bajos de acuerdo al Cuadro de Mando Integral”.
Para el uniformado, el problema radica en que sí se apresa a quienes se dedican a robar pero las víctimas de los asaltos no presentan las denuncias. “Eso ocasiona que no sea factible la detención y salgan enseguida (…) Pedimos la colaboración para que lo hagan”.