Antinarcóticos sigue la pista del narcotráfico en Manabí y Esmeraldas. El viernes, un despliegue policial inusual alteró la cotidianidad en San Vicente y en Bahía de Caráquez.Al menos un centenar de agentes de los grupos de élite de la Policía custodiaron los muelles en el estuario del río Chone, mientras 11 personas eran trasladadas a la cárcel de Bahía de Caráquez, en el cantón Sucre, a través de la gabarra. 15 camionetas 4×4 atravesaron el caudal.Las 11 personas habían sido detenidas en la hacienda Camarones, ubicada entre los cantones Jama y Pedernales. Allí, en una operación que se realizó cerca de las 03:00, Antinarcóticos halló 1,5 toneladas de cocaína.El jefe del Comando Provincial de Policía en Manabí, Pedro Gallegos, llegó a Bahía. Allí se realizó el pesaje de la droga.Por la tarde, se efectuó la audiencia de formulación de cargos. Hasta el mediodía de ayer se esperaba que los jefes policiales informaran sobre el caso, pero no hubo anuncios. Trascendió que el operativo formó parte de una redada que se había desarrollado también en otras provincias.Aunque Antinarcóticos no ratificó ni negó algún vínculo, el mismo viernes, cerca de las 17:00, la Policía allanó una hacienda ubicada a seis kilómetros del recinto Monterrey, en La Concordia. En ese lugar, que en su mayor parte es una plantación de abacá, fue descubierta una instalación con baldes, cintas de embalaje y electrodomésticos, la cual -según la Policía- podría ser un laboratorio para el procesamiento de cocaína (cristalizadero). Un oficial de Policía especialista en químicos identificó canecas con cloruro de calcio, acetona y clorhidrato de calcio. También halló permanganato de potasio y residuos de pasta base. “Esto sirve para transformar la base de coca en clorhidrato de cocaína”, aseguró el joven uniformado.El oficial llevó un equipo de laboratorio manual. Este le permitió identificar los reactivos que -según él- son óptimos para el refinamiento de la droga. En un recipiente se halló amoníaco. Roberto Padilla, jefe de Antinarcóticos de Santo Domingo, comandó la operación con 30 uniformados. Él calcula que “en este sitio se producían 50 kilos de cocaína cada 15 días”.Según Padilla, un equipo de canes rastreará la hacienda. “Se buscarán caletas donde presumimos se enterraban ladrillos de coca”. En la segunda planta de la casa, la Policía encontró un sello en forma de ‘S’ , un horno microondas, un horno artesanal y un refrigerador, así como también espátulas, cucharones y mezcladores.