Una embarcación que estaba siendo modificada para convertirla en semisumergible fue descubierta a las 23:50 de ayer en el norte de la isla Puná, en el Golfo de de Guayaquil.
La Armada encontró la nave en un sector de manglares, oculto entre una densa vegetación y embadurnado con lodo para evadir su ubicación por vía aérea y marítima, informó esta mañana, en rueda de prensa, el comandante del Cuerpo de Guardacostas, Fernando Noboa.
El oficial dijo que la embarcación, al parecer, sería de origen peruano. La nave se mantiene bajo custodia, y se espera la marea alta para ser remolcada hasta el continente.
Según Noboa, la nave “estaba en la etapa terminal de construcción, con un 70% de avance”. Un fiscal de turno viajó al sitio.
El semisumergible tiene aproximadamente 15 metros de largo y 4 de ancho. Se compone de cuatro compartimentos: uno en la proa, diseñado para el lastre, una amplia bodega, un compartimento para las máquinas y otro para el combustible.
Se calcula que tiene una capacidad para transportar de 10 a 15 toneladas de sustancias estupefacientes.
Según la Armada, la nave tendría relación con otro semisumergible detectado por la Fuerza Naval en enero pasado, y que fue fondeado por su tripulación para evitar su detención, vinculada presumiblemente al narcotráfico.
En el operativo para dar con la nave participaron el Comando de Guardacostas, la Capitanía del Puerto de Guayaquil y el Cuerpo de Infantería de Marina. La embarcación fue descubierta en un islote ubicado entre las islas Verde y Escalante, en el Golfo de Guayaquil.