Yo tengo mi almacén de venta de calzado en un centro comercial, en Ambato. Es un sitio muy concurrido y me han robado en tres ocasiones.
Se trata de las mismas personas, que se hacen acompañar de sus familiares, y se dan la vuelta por los almacenes con el propósito de hurtar la mercadería. Por eso es necesario que los centros comerciales tengan un banco de identificación de este tipo de personas, ya sea por información de los guardias de seguridad o las cámaras de vigilancia.
Otro problema es que hace falta mayor organización en los centros comerciales . Los delincuentes se aprovechan de la falta de ayuda y solidaridad entre las propietarias de los locales.
Quienes somos víctimas de la delincuencia tenemos un doble problema. Primero corremos el peligro de represalias por parte de los delincuentes o de sus familias que ya conocen el sitio en donde se cometió la fechoría. Por eso es necesario que los jueces no otorguen la libertad a los acusados a menos de 24 horas de su detención.
Otro problema que se presenta con frecuencia es que los denunciantes no tienen tiempo ni dinero para continuar con los trámites en la Fiscalía o Policía Judicial. De esto se aprovechan jueces, abogados e implicados. Este es un problema que aún la sociedad no logra resolver.