Las declaraciones del director de la Comisión Nacional de Tránsito, Ricardo Antón, generaron dudas y expectativas.
Él aseguró que habría sanciones para los conductores de transporte público que no cumplieran con las normas de seguridad a la hora de circular por las vías. Pero el anuncio se dio después de que el país se conmoviera por la muerte de 38 personas en un accidente de tránsito ocurrido a medio kilómetro de la laguna de Yambo.
A las 03:36 del 29 de agosto pasado, el bus número 51, de la Cooperativa Turismo Oriental, de placas AAW-510, cayó 100 metros hacia un barranco.
Según el informe preliminar de la Subdirección de Investigaciones de Accidentes de Tránsito (SIAT), el conductor de la unidad se quedó dormido al ingresar a una curva; chocó contra un guardavalla y se volcó.
Las 12 personas que sobrevivieron fueron trasladadas a diferentes casas de salud en Ambato, Latacunga, Salcedo y Quito, con pronóstico reservado.
En medio del dolor, los familiares de las víctimas pidieron explicaciones a las autoridades sobre por qué no se tomaron medidas antes de que se produjera el accidente. Antón aseguró que sí se ha trabajado de forma permanente en los controles, pero las estadísticas lo desdicen.
Entre enero y julio de este año hubo 9 194 accidentes que dejaron como resultado 939 fallecidos, entre adultos y niños; y 7 887 heridos en todo el país.
Antón trató de bajar la presión que tenía sobre la espalda anunciando sanciones concretas contra la cooperativa a la que pertenecía el bus que se volcó en Yambo. Ordenó la cancelación del permiso de la unidad de placas AAW-510 y la reversión de ese cupo al Estado.
También suspendió las operaciones de la cooperativa hasta que todos sus buses pasaran una revisión completa y se constatara que son seguros para circular.
Además, se multiplicaron los operativos de control en las terminales. En Quitumbe, un chofer fue detenido porque se aprestaba a realizar un viaje, en estado etílico, llevando pasajeros. Antón volvió a anunciar que el permiso de funcionamiento de la unidad involucrada sería revocado.
Guillermo Abad, director de Justicia Vial, aseguró que no solo las cooperativas o los conductores debieran responder por las fallas de las seguridades en el sistema de tránsito, también la máxima autoridad de tránsito en el país: la Comisión Nacional de Tránsito. “La tragedia en Yambo fue el resultado de una cadena de irregularidades e inobservancias a la Ley, que se originan en el propio organismo de control”.
En la Ley de Tránsito, agregó Abad, se establece que todos los choferes deben ser afiliados al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social y el Director de la Comisión tiene la competencia para sancionar a las cooperativas que incumplan la normativa. Sin embargo, “no se hizo nada”.
Además, afirmó que las rutas y frecuencias de los buses ya debían ser revertidas al Estado para que fueran redistribuidas a través de un contrato de operaciones. “Así se hubiera podido evitar la sobreoferta de buses que existe en el país”, explicó Abad.
“Esto es relevante porque los buses salen con cuatro o cinco pasajeros de la terminal y para ganar algo más de dinero se pelean, como en pista de carrera, con otros buses que buscan pasajeros en el camino y se producen accidentes”. Antón no tardó en responder. Dijo que a él no le iban a enseñar cómo aplicar la Ley de Tránsito y responsabilizó al sistema de justicia por no sancionar a los conductores que ya perdieron su licencia y siguen manejando, como José Luis Mogrovejo, que debía 45 puntos y perdió la vida en el accidente de Yambo.
Para Wilson Pavón, director del SIAT, la solución del problema está en un cambio de actitud de la ciudadanía.
A su juicio, la Ley debiera cumplirse con la aplicación de la responsabilidad compartida.
Eso quiere decir que todas las personas e instituciones deben comprometerse con el estricto cumplimiento de la normativa. “Va desde la misma entidad que otorga un permiso de operación. Nunca va a ser suficiente si tenemos la indisciplina y la informalidad de por medio, con una legislación que es muy permisiva y nos hace caer en la impunidad”.
Él considera que mediante la información levantada por la Fiscalía y la Policía, en materia de accidentes, se podría generar una política integral de Estado en materia de seguridad vial.
En esta intervendrían los sectores que buscan reducir el índice de accidentes a escala nacional como Salud, Justicia, Educación, Transporte, así como las instituciones del orden.
¿Por qué razón está aquí?
Dispuso la reversión del permiso de operación del bus que se accidentó en Yambo. El cupo que le pertenecía al propietario de esa unidad de transporte será entregado al Estado.
¿Quién es ?
En diciembre del 2008 fue nombrado director de la Comisión Nacional del Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial. Antes se desempeñaba como Jefe de la Comisión de Tránsito del Guayas (CTG).
Lo que dijo
No se esperó a que se produjera el accidente en Yambo para adoptar medidas. Lo he hecho desde que me pusieron en este puesto. La orden es que se den controles las 24 horas del día.