La renuncia del director de la Unidad de Análisis Financiero (UAF) llegó a la Procuraduría General del Estado hace pocos minutos.
El movimiento en esas oficinas, ubicadas en el norte de Quito, fue normal esta mañana. Iturralde continuaba en funciones y dando entrevistas a medios de comunicación pese al hermetismo con que se manejaba su salida por parte de los funcionarios de la Unidad. La medida fue inesperada.
El lunes el procurador general del Estado, Diego García, consultó al presidente Rafael Correa si podía solicitar la renuncia a Gustavo Iturralde. Según el Director de la entidad que controla el flujo irregular de dinero, García lo llamó el lunes en la noche para manifestarle que no “compartía la forma en cómo dirigía la Unidad” y que a más tardar debía presentar su renuncia la tarde de ayer.
Sin embargo, por papeleos aún pendientes, Iturralde laboró hoy. La Procuraduría informó que el documento oficial de su renuncia llegó al despacho de García y que no conocían si Iturralde vaya mañana a la UAF.
Después de que una avioneta mexicana se accidentara en Pedernales con USD 1,3 millones el 13 de mayo, Iturralde rompió el silencio. Dijo que había advertido “que el país está siendo utilizado como tránsito de dinero sucio”. Incluso habló del nexo entre carteles mexicanos y mafias de Colombia, en Ecuador.