Personal militar de Jaramijó, en Manabí, escuchó el sábado, 2 de julio, la propuesta del Ministro. Foto: Ministerio de Defensa
En el proyecto de reformas a la cesantía y pensiones de las Fuerzas Armadas, se habla de “equidad y justicia para todos los servidores militares”.
Con base en esos principios, el ministro de Defensa, Ricardo Patiño, ha justificado los cambios que impulsa a la seguridad social de los uniformados. Una de las reformas es la reducción de aportes al Instituto de Seguridad Social de las Fuerzas Armadas (Issfa).
Los militares aportan el 23% de su sueldo al Issfa y el proyecto de Defensa propone que solo destinen el 18,75%. Asimismo, se plantea la reducción del aporte patronal, a cargo del Ministerio de Defensa, del 26% al 19,75% (ver infografía).
En consecuencia,se trata una reducción total del 10,5% respecto a los montos que actualmente aporta el personal y el Estado mensualmente.
Estos cambios se detallan en los folletos que Patiño entrega a los uniformados, en su recorrido para “socializar” las reformas.
Debido a la reducción en el aporte de cada soldado, habrá un aumento de su sueldo mensual equivalente al 5,5% (un sargento primero gana USD 1 265 y subiría a USD 1 335). Pero la propuesta inquieta a los militares, quienes en lugar de que se reduzca su aportación ahora, piden que se mantengan las pensiones y cesantías.
Ese mensaje fue recurrente la semana pasada en las visitas de Patiño a unidades militares de Cotopaxi, Chimborazo, Guayas y El Oro. Llevó los folletos y usó presentaciones en Power Point, para exponer los puntos más importantes de la reforma.
Actualmente, las pensiones se calculan a partir de la última remuneración mensual unificada del militar, multiplicada por un índice que resulta de los años de servicio. El proyecto plantea que se promedien los sueldos de los últimos 5 años por el índice. El resultado: una reducción de las pensiones.
En el folleto se reconoce una “reducción marginal” y se dice que el propósito es “alcanzar progresivamente la equidad en las filas de las FF.AA.”.
En la visita del sábado, 2 de julio, a la Base Naval de Jaramijó, Patiño habló de la “solidaridad”, que significa “que todos tengan derechos iguales a pesar de tener ingresos distintos, que todos sean tratados igual”.
Los techos a la cesantía
Con la actual Ley de Seguridad Social de las FF.AA. un oficial recibe por cesantía montos que van hasta USD 211 280, para un general de Ejército (oficiales), y hasta USD 106 760 para un suboficial mayor (tropa). Con el proyecto, el techo máximo sería de USD 98 093 para un general de Ejército y de USD 68 370 para un suboficial mayor (ver recuadro).
Sin embargo, el proyecto prevé montos adicionales de hasta USD 50 000 para las jerarquías más altas: generales, coroneles y suboficiales. Estos montos se aplicarán durante el 2016 y el 2017, mientras dure la transición. A partir del 2018, los montos adicionales se reducirán en USD 5 000 cada año hasta llegar al techo por rango.
La propuesta del Gobierno es que estos montos se reduzcan para quienes perciban más y se aumenten para los que reciben menos, como el personal de tropa (soldados y cabos).
Bolívar Silva, miembro del Consejo Directivo del Issfa, dice que este proyecto de reformas es “totalmente desconocido”. Asegura que ni los técnicos de esa institución han podido participar en la elaboración del borrador que se difunde en los cuarteles.
Militares en servicio activo, que participaron en las presentaciones del Ministro, aseguran que “todavía hay muchas dudas en el aire”.
Ellos sostienen que en las charlas se les han entregado folletos, pero no han podido acceder a los artículos completos ni al borrador del proyecto para reformar las pensiones y cesantías militares.
El Ministerio de Defensa asegura que, en estos diálogos, Patiño contesta cada una de las inquietudes del personal.