Zumbidos de balas e impactos por todas partes. Presuntos delincuentes disparando a quemarropa a los policías y estos respondiendo con disparos.
Un hombre sin vida tendido en la vereda en la entrada de una vivienda. Ese escenario de violencia conmocionó anteayer a los vecinos y comerciantes de la calle Juan Paz y Miño, en La Concepción, norte de Quito.
Ellos fueron testigos de la balacera registrada durante el asalto a dos personas que iban a realizar un depósito bancario. El robo con la modalidad sacapintas (atraco a clientes de bancos en las cercanías de las entidades financieras) se incrementó en Quito: de 81 casos en el 2009 a 169 en el 2010.
Ese crecimiento es solo un indicador del aumento de la violencia en la capital. Según las estadísticas registradas por el Sistema de Información para la Gobernabilidad (Sigob), de enero a abril Quito fue la ciudad con la mayor incidencia de robos en el país.
En el primer cuatrimestre del 2011, en la ciudad hubo 2 044 robos a personas frente a 1 772 registrados en Guayaquil. En el 2010, Guayaquil lideraba en el país esa forma de delito (durante el año hubo 6 080 hechos, frente a 4 244 reportados en Quito).
Según Edwin Pérez, coordinador de la Unidad de Patrimonio Ciudadano de la Fiscalía de Pichincha, en la capital se receptan denuncias de hechos cada vez más violentos. Solo en junio se reportaron crímenes atroces como el del actor Manuel Calisto, en su domicilio, en la Granda Centeno, norte de Quito. También se registraron balaceras, como la de anteayer y la del sábado en la Villa Flora: el móvil de estos dos últimos hechos era económico.
Pérez considera que el aumento de robos se debe a que “en la mayor parte de procesos penales se determinó, sin valoración previa, la salida masiva de detenidos, que se acogieron a medidas sustitutivas (como fianzas)… Estos justifican su arraigo social muchas veces adulterando documentos en juzgados de Inquilinato”.
Lourdes Rodríguez, secretaria de Seguridad del Distrito Metropolitano, desvirtúa que las estadísticas del Sigob sirvan como indicador para catalogar a Quito como la ciudad más insegura. “Estas cifras de delitos contra la propiedad y las personas son fundamentalmente denuncias. Dependen mucho de la cultura de denuncia de cada ciudad. Por eso no son comparables, ya que en Guayaquil y las ciudades de la Costa hay una menor formalidad”, dice.
No obstante, Rodríguez acepta un incremento en el nivel de violencia. “Hemos visto un número más alto de asaltos a domicilios en algunos lugares que tenemos definidos”. También en este tipo de delitos, la capital está arriba con 926 casos denunciados frente a los 451 de Guayaquil, de enero a abril, según el Sigob (Quito también registra más robos a vehículos y a motocicletas).
El valle (este de Quito) registra asaltos violentos a casas. Allí, Carlos R. (nombre protegido), de 70 años, y 15 de sus familiares (esposa, hijos y nietos) vivieron una verdadera pesadilla. A eso de las 19:00 se habían reunido para acompañar a Carlos R. y a su esposa, ya que ella al siguiente día iba a someterse a una intervención quirúrgica de riesgo.
Repentinamente, cinco desconocidos ingresaron a la casa y les amedrentaron con armas de fuego y los encerraron en un dormitorio. Les robaron computadoras, carteras, relojes, memorias de los autos estacionados en el patio y hasta el anillo de matrimonio que tenía puesto desde hace 40 años.
Los dos casos de sicariato reportados este mes, con armados en motocicletas que acribillaron a personas que se movilizaban en sus vehículos, tampoco parecen hechos aislados.
El Observatorio Metropolitano de Seguridad Ciudadana revela que durante el 2010 en Quito se incrementaron los homicidios, de 10 por cada 100 000 habitantes en el 2009 a 13 en el 2010.
Lourdes Rodríguez admite que “antes teníamos un número bien alto que tenían que ver con peleas y ese tipo de cosas. Ahora son muertes pagadas”.
La Secretaria de Seguridad reconoce que esto se debe a la presencia en Quito de crimen organizado, dedicado a robos de domicilios, asaltos a blindados y a personas y al microtráfico de drogas. Antinarcóticos de Pichincha identifica 76 zonas tomadas por esta actividad ilícita en la urbe”.
Punto de vista
Andrés Gómez/ Catedrático
‘En las capitales hay más dinero’
La relación entre pobreza y delincuencia se deslegitima porque hay una economía global del delito que genera dinero a través de las redes delictivas.
En medio de esa economía se genera la violencia y aparecen los casos de asaltos y vendettas (tipo sicariato) como los que ocurrieron en Quito.
Tenemos que abrir la ‘caja negra’ y descubrir las redes que están detrás de los asaltos. ¿Quiénes son ellos? ¿Cómo consiguen las armas?
Ecuador está inmerso en esa economía global, comenzando por los narcóticos. El registro de homicidios es más alto en las capitales porque hay más dinero.
Los hechos relacionados con la balacera del martes entre sacapintas y policías en el norte de Quito
El asalto
Personas armadas arrollaron anteayer a tres policías que custodiaban a personas que iban a depositar USD 12 000. Se llevaron el dinero en una balacera en La Concepción, en Quito.
La denuncia
La Policía detuvo a seis sospechosos. Ayer, el ministro del Interior, José Serrano (foto), llegó a la audiencia de flagrancias y los acusó. La Justicia ordenó prisión preventiva para los seis.
Las secuelas
En la balacera murió José C., 26 años, sospechoso (foto); su cadáver fue llevado ayer a Babahoyo. El policía Nixon Ch. resultó herido; en dos cirugías le extirparon parte del hígado y páncreas.