Los tres hombres fueron presentados ayer, a las 12:15, en el primer piso de la Policía Judicial. ¿Qué conocen sobre los 600 uniformes que supuestamente tenían como destino a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC)?, les preguntó la prensa.
No contestaron y abandonaron la sala bajo custodia policial. Según los agentes de la Unidad de Lucha Contra el Crimen Organizado (ULCO), ellos pertenecerían a una organización que transportaba en un camión y una camioneta 593 parches con las siglas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia Ejército del Pueblo (FARC-EP), 600 botas de caucho verde, 526 chalecos y 600 uniformes de camuflaje pixelado con el logotipo de una de las fuerzas militares de Ecuador.
Ellos fueron detenidos junto a otras dos personas, el martes, a las 22:30, en Oyacoto (norte de Quito). En la audiencia de flagrancia, uno de los aprehendidos señaló que “desde hace varios años se dedica al negocio de venta de uniformes militares. Por ello, incluso contaba con RUC. Las prendas fueron adquiridas a una empresa textil por un valor de USD 34 000, una letra de cambio y un cheque girado para efectivizarse al otro día”.
Agregó que suscribió un contrato hace tres días, con un militar, antes de ser arrestados. El soldado les presentó una credencial de FF.AA. “Dijo que era de adquisiciones de los militares, que por favor le vendamos estos uniformes… El señor estuvo como custodia en un Vitara SZ”.
También aseguró que “los uniformes iban a ser entregados en Ibarra”. Para la Policía, la ruta que se utilizaría para trasladar la mercadería se inició en Quito, pasaría por Ibarra y finalizaría en Tulcán (frontera norte).
“Por la cantidad de prendas decomisadas y la ruta, los uniformes tendrían como destino una de las columnas del Frente 29 de las FARC”, señaló un agente de Inteligencia de la ULCO .
En lo que se refiere a los 593 parches con el logotipo de la agrupación subversiva, el detenido señaló que “nunca tuvimos que ver con los sellos de las FARC, presumo que a lo que me fui al baño (en una gasolinera, antes de ser detenidos) y el señor (el militar) pasó por la camioneta me puso esos sellos”.
Luego de la audiencia de flagrancia, el juez vigésimo primero de Garantías Penales de Pichincha, Santiago Coba, ordenó la prisión preventiva para tres sospechosos, mientras que otros dos detenidos recibieron medidas sustitutivas y deberán presentarse cada ocho días ante el Juzgado. El magistrado emitió el dictamen con base en el artículo 147 del Código Penal, el cual sanciona al posible delito de movimientos subversivos.
La Fuerza Aérea Ecuatoriana dijo ayer en un comunicado que, revisados los registros de personal, “ninguno de los ciudadanos mencionados en la noticia pertenecen a la institución”.