El cargamento de 1501 cartuchos de calibre 5.56×45 que fueron decomisados por agentes de la Unidad de Lucha contra el Crimen Organizado (ULCO) en Nueva Loja, Sucumbíos, levanta nuevas pistas.
Uniformados de esa dependencia policial investigan si esas municiones tienen relación con otro cargamento de 5 000 balas decomisadas hace más de 15 días en la misma zona.
Según un agente de la ULCO “se indaga si el cargamento, hallado la noche del martes, se relaciona con el incautado hace más de una semana”.
Según la Policía, para el decomiso de los 1 502 cartuchos se allanó una vivienda en la que supuestamente se almacenaba el armamento y munición “para grupos subversivos como las ARC-EP”. En el operativo, un miembro activo de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) fue aprehendido. Junto al uniformado fueron arrestados una mujer y dos hombres.
En la Policía se informó que el militar supuestamente “fue quien llevó las municiones hasta el inmueble allanado”.
En la incursión, los agentes se incautaron de 1501 cartuchos de calibre 5.56×45, un revólver de fabricación artesanal, con serie No. 00777, una cartuchera de fabricación artesanal y 24 cartuchos calibre 38.