La Policía colombiana recibió de sus pares de Ecuador a un presunto rebelde que se dedicaba a la importación de armas para un frente de las FARC y que había viajado al país vecino para someterse a una intervención quirúrgica en una pierna, informaron hoy las autoridades en Bogotá.
El colombiano Edilson C. fue deportado el domingo a su país por la Policía de Ecuador, que lo capturó el sábado en una zona rural cercana a Quito, dijo el director de la Policía de Colombia, general José Roberto León.
El jefe policial explicó en una conferencia con la prensa que su captura se derivó de informes facilitados por Colombia a Ecuador, país al que el Edilson C. había viajado el pasado 15 de julio.
El detenido se desplazó a Quito para someterse a una operación de una rodilla que se lesionó en un combate con tropas militares colombianas, agregó León, quien apuntó que el deportado viajaba con frecuencia al país vecino para gestionar “la importación de armas con destino al sexto frente de las FARC”.
Este frente guerrillero actúa en zonas indígenas del Cauca, que es uno de los departamentos colombianos más afectados por la actividad de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Según el jefe policial, Edilson C. hacía parte de la Comisión Internacional de las FARC, era el tercer cabecilla de la Columna “Gabriel Galvis” de esta organización y estuvo detenido hasta mediados de junio de 2001.
El general León indicó que el deportado está relacionado con dos recientes decomisos de arsenales de guerra, uno en la frontera de Ecuador y Perú, y otro en Caloto, localidad en el departamento colombiano del Cauca.
La captura de Edilson C. “es el primer resultado” de la fase inicial de una investigación abierta por las autoridades de Colombia y Ecuador “para descubrir el cartel que está vinculado con ese tráfico de armas”, resaltó el alto oficial.
Además de este delito y el de rebelión, el hombre está acusado por concierto para delinquir, secuestro extorsivo, porte de armas, terrorismo y extorsión, según las autoridades colombianas.
Castro tenía en contra una circular azul (de localización en el exterior) emitida por la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol).