El avión ministerial estaba a punto de salir del aeropuerto de Lago Agrio, en Sucumbíos. Antes de embarcarse en la aeronave, el ministro de Defensa, Javier Ponce, explicó que la Policía colombiana también hizo disparos a una patrulla ecuatoriana la noche del lunes. “Hemos hecho el reclamo respectivo”, dijo.
El fuego que recibieron 25 soldados del Ecuador en el sector Conejo, en Sucumbíos, se inició antes de las 23:00. “La Policía colombiana es muy asediada por la guerrilla. Por la oscuridad de la noche, ellos hicieron los disparos de advertencia”, señaló Ponce.
El Ministro reveló este detalle cuando finalizaba su visita a Coca (Orellana), Shushufindi y Lago Agrio (Sucumbíos), ayer en la tarde. Él llegó para entregar viviendas fiscales a los militares. Soldados asentados en el destacamento Lauro Guerrero, en general Farfán, detallaron el incidente a Ponce en una cita a puerta cerrada.
Los militares estaban por finalizar sus patrullajes fluviales, cuando las balas salieron de territorio ecuatoriano.
Luego, los uniformados recibieron fuego del lado colombiano. Los disparos que recibieron también provinieron de armamento policial de Colombia. Esto ocurrió en el sector donde se encuentra el puente internacional San Miguel, frontera con Colombia.
Pese a los disparos realizados, las autoridades militares no especificaron si los tiros fueron directamente contra personal del Ejército. “La Policía colombiana no arremetió contra la patrulla ecuatoriana. Ellos cumplían con lo que tienen establecido y es misión de ellos (policías colombianos) de cumplir con sus funciones”, acotó Wagner Bravo, comandante del Comando Operacional 1 Norte. El oficial dijo que después del incidente, el Ejército dio “parte a los estamentos correspondientes”.
Afirmó que será el Ministerio de Relaciones Exteriores el encargado de conversar con autoridades colombianas .
El martes se difundió el ataque como una emboscada perpetrada por elementos de los Grupos Irregulares Armados de Colombia (GIAC). Pero ayer hubo nuevas noticias.
Marco Vera, comandante general del Ejército, dijo que los irregulares atacaron a la patrulla. Sin embargo, en la mañana de ayer, durante su intervención en la Brigada de Selva Napo, en Coca, no se mencionó que la Policía colombiana también abrió fuego.
Según el informe difundido por el Comando Conjunto, el martes en la tarde, los soldados respondieron al ataque. Un incidente similar ocurrió en noviembre del año pasado, en donde falleció el cabo Fabián Chango. Ponce ratificó que en esa ocasión se señalaron debilidades: el soldado no llevaba el chaleco antibalas.