De local en local de la Plaza Arenas, los agentes fueron revisando. En la mayoría encontraron herramientas, electrodomésticos, equipos de computación y más, sin que los comerciantes logren justificar su procedencia.
A eso de las 11:00, unos 50 policías y agentes fiscales llegaron sorpresivamente al ubicado en el Centro Histórico de Quito. Estos locales están dedicados a la venta de ropa, calzado y objetos de ferretería, cerrajería y hojalatería.
Sin embargo, los policías mientras revisaban, encontraban camuflados objetos como computadoras, impresoras, juegos de Nintendo, televisores, videocaseteras y más.
En otros locales hallaron podadoras eléctricas, compresores de aire, sierras eléctricas, taladros, etc.
Más allá descubrieron que entre la ropa de venta estaban ocultas varias licuadoras, además decomisaron refrigeradoras, cocinas y cilindros de gas, microondas, incluso licores.
Los comerciantes permanecían impávidos mirando cómo los agentes requisaban sus locales. Un comerciante se acercó a uno de los coordinadores del operativo para manifestar que en ocasiones anteriores, cuando se acercó a las bodegas de la Policía Judicial (PJ) a reclamar por sus pertenencias decomisadas, no las encontró.
Otra comerciante dijo que esta es la segunda que se realiza un operativo en la Plaza Arenas en menos de tres meses. El mayor Silvio Dávila, de la PJ de Pichincha, que se continuará con este tipo de controles.