El presidente Rafael Correa nombró al teniente general Leonardo Barreiro como nuevo jefe del Comando Conjunto. La FAE será comandada por Enrique Velasco.
Lo arrastraron en la pista de la Base de Taura. Lo amarraron y lo golpearon en la cara. Lo subieron al avión encapuchado y lo volvieron a golpear. Este relato del comando Pedro Dimas reseñaría lo sucedido con los militares de la FAE que en febrero de 1987 participaron en el “Taurazo”, el secuestro al presidente León Febres Cordero.
Dimas recuerda que entre los cuatro oficiales que torturaron a los comandos está uno de apellido Barreiro. Lo dijo ante la Comisión de la Verdad (CV), conformada en este Gobierno y que investigó las violaciones a los derechos humanos perpetradas por el Estado entre 1984 y el 2008.
Fue ese organismo que señaló a Leonardo Barreiro como uno de los 458 presuntos perpetradores dentro de ese período.
Ayer, el presidente Rafael Correa nombró a Barreiro como nuevo jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (Comaco), es decir, en la jefatura más alta existente entre los militares. Y reemplaza al general de Ejército, Ernesto González.
Hasta ayer, Barreiro fue comandante de la FAE y fuentes de esa Fuerza militar dijeron que las revelaciones de la CV están en investigación, que no hay nada confirmado y que el oficial tampoco se ha referido a ese tema.
Con la salida de Barreiro de la aviación, Correa también nombró a su reemplazo. Ahora, el brigadier general Enrique Velasco es su nuevo comandante.
Este oficial no era el más antiguo de la terna que el Ministerio de Defensa envió a la Presidencia. Oficiales como el teniente general Alonso Espinosa y el brigadier general Eduardo Esparza tenían rangos superiores al nuevo comandante de la FAE, pero los dos pasarán a disponibilidad.
En la Marina y en el Ejército no hubo cambios en sus mandos, aunque sus comandantes, Jorge Gross y Marco Vera también integraron la terna analizada por Correa y de la que salió el nuevo jefe del Comando Conjunto.
Con la salida del general González, el Ejército deja la jefatura del Comando Conjunto que la mantuvo con los generales Fabián Varela y González. Y la FAE vuelve a ese nivel de mando tras cuatro años. Esto, porque el último oficial de la Fuerza Aérea en ese cargo fue el teniente general Hector Camacho.
Hasta ayer, en el complejo militar de La Recoleta (sur de Quito) no se sabía exactamente cuándo ocurrirá el relevo oficial. Pero tampoco se dio más explicaciones sobre el informe de la CV.
Al referirse al caso de Taura, allí se dice además: “De acuerdo con los testimonios de Daniel Quinde, Pedro Loor y Patricio Quillupangui, el capitán Barreiro junto a otros oficiales sometieron con violencia a los comandos en la Base Aérea de Taura, para entregarlos a miembros de la Marina, que trasladaron a los comandos a Quito en avión, el 21 de enero de 1987”
Barreiro, un piloto de combate, es el único oficial activo del Frente Militar que tras la insubordinación policial del 30 de septiembre del 2010 aprobara la Operación Rescate que ejecutaron las FF.AA. para rescatar a Correa del Hospital de la Policía.
Ese día, soldados de la aviación se tomaron la pista área de la Base Aérea en apoyo a los policías que rechazaban la nueva Ley de Servicio Público aprobada la noche anterior en la Asamblea.
La llegada de este oficial al mando de las FF.AA. ocurre en medio de alertas sobre el narcotráfico y el crimen organizado para el país. El miércoles de la semana pasada, el general González, en su informe de despedida, aseguraba que las mafias transnacionales amenazan por las fronteras norte y sur. Pero además aseguró que los grupos irregulares de Colombia también son un riesgo.
Pero fue el Ejército, que en su informe de responsabilidad social, aseguraba que el narcotráfico y el crimen se pueden desbordar si el Gobierno no toma las medidas adecuadas. En la FAE, en cambio, no ha existido pronunciamiento alguno sobre estos fenómenos delictivos. En un mensaje publicado en la página Web de esta Fuerza, Barreiro dice: “Asumiremos con entereza todos los desafíos”. Pero antes asegura: “El mayor patrimonio de nuestra institución es el elevado nivel de trabajo, profesionalismo, disciplina y los valores”.
Para el 2012, el Gobierno plantea en su plan de Seguridad integral que las FF.AA. asuman el combate al narcotráfico.
Frente al narcotráfico
En febrero, el Ejército dijo, en el Reporte de Responsabilidad Social, que si “no se toman los correctivos adecuados”, el narcotráfico llegará a “desbordarse del control gubernamental y caer en índices de violencia extremos, obligando al Gobierno a tomar medidas como la intervención de FF.AA.”.
El 4 de abril, el saliente jefe del Comando Conjunto, Ernesto González, dijo: “Los factores que amenazan a la seguridad del Estado se han aumentado vertiginosamente (…) La situación de la frontera sur también es compleja. No olvidemos el problema que vive nuestro vecino debido al aumento del narcotráfico”.
En el Plan de Seguridad Integral, difundido por el Gobierno, reza que la Política de la Defensa, en el 2013, “admite el empleo racional de las FF.AA., para enfrentar a las nuevas amenazas”. Los militares cumplirán “operaciones contra el narcotráfico, crimen organizado y terrorismo”.
Ficha:
Leonardo Barreiro Muñoz, Jefe Comando Conjunto FF.AA. Teniente general de Quito. Fue comandante de la FAE (desde el 22 de abril del 2010 hasta ayer), jefe de Estado Mayor, agregado aéreo en Bogotá. Cursó el Air Carrier Operation Indoctrination (EE.UU.). Piloto instructor de aviones A-37-B y Mirage F-1, jefe del Escuadrón de Combate 2112.
Jorge Gross Albornoz, Jefe de Marina. Vicealmirante. De Quito. Se posesionó el 28 de enero 2011. Fue comandante de Operaciones Navales, de la I Zona Naval, la Casa Presidencial, agregado en Washington.
Marco Vera Ríos, Jefe del Ejército. General de División. De Quito. Se posesionó el 1 de febrero. Fue jefe del Estado Mayor del Ejército, de la III División, del Cuerpo de Ingenieros, agregado militar en Brasil.
Enrique Velasco Dávila, Jefe de la FAE. Brigadier general. De Guaranda. Fue comandante de Operaciones Aéreas (hasta ayer), director de RR.HH. de la FAE, agregado aéreo en Santiago, etc.