Una estación de Policía del pueblo de Murindó, en el departamento de Antioquia, noroeste de Colombia fue atacada a disparos ayer. Las autoridades colombianas atribuyeron el atentado a un grupo de rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El hecho ocurrió pese a que la guerrilla declaró un cese del fuego para la Navidad.
Según el secretario de Gobierno de Antioquia, Santiago Londoño, el ataque duró 45 minutos y fue repelido por policías, sin registrarse daños. Él afirmó que los responsables son “una pequeña facción de este frente” que si bien dirigen sus ataques contra la estación policial, “generan miedo en la población”.
El gobernador de Antioquia, Sergio Fajardo, dijo en su cuenta de Twitter: “Las FARC en tregua unilateral hostigaron a Murindó el pueblo más pobre de Antioquia, preciso en jornada de atención a víctimas. Revolución?”.
El viernes se celebraba una jornada de atención a las víctimas del conflicto armado interno en el Municipio, poblado por indígenas y afrodescendientes y al que sólo se puede llegar desde Medellín, navegando por ríos.
El 19 de noviembre la cúpula de las FARC declaró un alto el fuego unilateral hasta el 20 de enero. Esta tregua navideña era una declaración de intenciones de la guerrilla, que el viernes terminó el segundo ciclo de negociaciones con el Gobierno en La Habana. Sin embargo, el frente 36 de Antioquia declaró que desconocían las directrices de la cúpula de la guerrilla.