[[OBJECT]]La calle 13, en el centro de Manta, lució congestionada ayer. Desde las 15:00, cerca de 800 motociclistas, acompañados de familiares y amigos, se movilizaron al Municipio que queda a dos cuadras del malecón de la ciudad.
La consigna de los manifestantes era pedir al Cabildo que derogue la Ordenanza que determina que en las motos máximo pueda movilizarse una persona. La norma fue aprobó hace ocho días y en la exposición de motivos gravitó el criterio de sobreponer la seguridad de una ciudad, frente a la comodidad de los motociclistas.
A la marcha, la gente llegó con carteles en mano. En uno de ellos se leía: “Nosotros los pobres somos tratados como delincuentes. Abajo esa ley incoherente”.
“La medida es injusta, queremos que la deroguen, nunca socializaron la Ordenanza con nosotros los motorizados”, comentaba molesto un comerciante de pescado. Un artesano, en cambio, dijo que “la situación económica de cada hogar donde hay un motociclista será afectada, pues se tendrá que sacar dinero para el transporte de los niños a las escuelas y para la movilización de las esposas a sus trabajos”.
Voces de apoyo a los motociclistas manteses llegaron también desde Quito. Ricardo Rocco, secretario Nacional de la Escuela de Motos, explica: “la Ordenanza es un atentando a los derechos humanos y a las libertades civiles. Creo que se deben adoptar otro tipo de medidas para combatir la inseguridad en el país”.
Edmundo Durán, presidente de la Federación de barrios de Manta, está de acuerdo con la ordenanza y hace una sugerencia. “Quizá haya que hacer ciertas concesiones, como permitir que una mujer y un hijo viajen con el conductor, pero esta medida es para que Manta tenga paz, por eso hay que apoyarla”.
Datos de la Subjefatura de Tránsito refieren que en Manta circulan 7 000 motos, 5 000 están legalizadas y con matrícula. Se estima que en esta ciudad, Montecristi y Jaramijó las motos movilizan a 14 000 usuarios al día (entre pilotos y copilotos).
La Ordenanza aprobada por 11 concejales aún no rige. El concejal Agustín Intriago admite que la medida es fuerte, pero ineludible. “Afecta a las personas que tienen en la motocicleta su medio de transporte, pero debemos emprender acciones tendientes a combatir la delincuencia que se mueve sobre ruedas”.
Dos hechos de violencia que conmocionaron a Manta en junio fueron perpetrados desde motocicletas. Uno de ellos fue el asesinato de Luis J. el 13 de ese mes. Él y dos familiares fueron víctimas de un atentado: desconocidos arrojaron un explosivo a su casa. Los tres resultaron ilesos, pero al día siguiente Luis J. fue acribillado por sicarios que iban en moto.
El otro crimen se reportó el 29 de junio. Cerca de las 15:00, Elizabeth M. realizó un retiro de la sucursal de un banco en un centro comercial y subió a su vehículo. Iba junto a su madre, cuando se percató de que dos desconocidos intentaban interceptarla en una moto. Ellos la asesinaron.
Frente a la protesta, el alcalde de Manta, Jaime Estrada, dijo que no hay vuelta atrás y que la medida regirá desde la próxima semana.
Johnny E., quien usa motos, cree que la Ordenanza no cabe. “Aquí pagamos justos por pecadores. Con mucho esfuerzo uno se compra una motocicleta”.
Él cuenta que transporta a su madre al trabajo. Mientras este hombre aparcaba su vehículo en las afueras de su trabajo, en las instalaciones del cuartel del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) funcionarios de la Policía se reunían con tres alcaldes y 18 representantes de los gobiernos seccionales de Manabí para tratar el tema de la inseguridad.
Allí, técnicos del sistema informático de la Policía anunciaban las estadísticas de delitos más recurrentes en Manabí y en el país. Según el Sistema de Información para la Gobernabilidad Democrática , los hechos delictivos más comunes en la provincia son asesinatos y homicidios (80 casos de enero a abril), robo a personas (379 hechos), a domicilios (264), a locales comerciales (136) y robo de motocicletas (124).
Miguel Cisneros, jefe del Comando de la Policía en Manta con influencia hasta Montecristi y Jaramijó, asegura que los policías están listos para ejecutar la decisión municipal cuya denominación es: “Ordenanza que crea cultura de seguridad a quienes circulan en motocicletas en las vías del cantón Manta”.
Un voceador, quien pertenece a un grupo de 30 personas que usan este automotor para trabajar, sostiene que “la Ordenanza es injusta, la Ley de Tránsito estipula que pueden circular dos personas sobre una moto”.
“Mataron a mi sobrino a sangre fría, cuando caminaba por la entrada del barrio, los sicarios iban en una moto y el copiloto le disparó por la espalda, estoy de acuerdo con la medida”, dice Fabián A.
A Washington Arteaga, alcalde de Montecristi, le preocupa que se produzca un desplazamiento de armados en moto que operan en Manta a su jurisdicción.
El alcalde Estrada refiere que el texto de la Ordenanza será enviado a la Dirección Nacional de Tránsito. “Es una medida dura, pero el peligro que existe por la inseguridad debe ser combatido con acciones drásticas”.
Al cierre de esta edición, se conoció que la protesta terminó en desmanes. La Policía informó 20 motociclistas fueron detenidos.