El Tribunal de Apelación de la Corte Nacional, conformado por los jueces Luis Rivera, Daniella Camacho y Felipe Córdova, analiza si ratificar o no la sentencia del exvicepresidente Jorge Glas y seis personas más. Todos están condenados por peculado, en el caso Singue.
Los magistrados analizan su fallo judicial desde el pasado 29 de julio del 2022. Ese día se realizó la audiencia de apelación, en la Corte Nacional, en Quito. Aún no se fija fecha y hora para dar a conocer su resolución.
Con este recurso judicial, los siete sentenciados buscan apelar la condena dictada el 25 de enero del 2021. Ese día, otro Tribunal decidió que Glas, los exministros Carlos Pareja Yannuzzelli, Wilson Pástor y uno más sean condenados como coautores del delito de peculado. Los jueces les impusieron ocho años de cárcel.
Mientras que otros tres implicados en esta causa fueron sentenciados como cómplices y les impusieron una pena de cuatro años de cárcel.
Según las investigaciones de Fiscalía, los siete sentenciados participaron de la adjudicación irregular de un campo petrolero en Sucumbíos. La entidad aseguró que esto ocasionó un perjuicio económico para el Estado.
De hecho, en la audiencia del 29 de julio pasado, la Fiscalía dijo que las pruebas testimoniales, periciales y documentales presentadas en la audiencia de juicio demostraron que el delito de peculado se cometió al adjudicar el contrato de exploración y explotación del campo Singue.
Además, la entidad señaló al Tribunal que los sentenciados dispusieron arbitrariamente del campo petrolero y perjudicó al Estado.
Postura de los abogados
En cambio, los abogados de los sentenciados negaron las acusaciones de Fiscalía y también rechazaron la sentencia impuesta el año pasado.
Por ejemplo, Edison Loaiza, abogado de Jorge Glas, dijo: “las pruebas jamás demostraron la existencia del delito de peculado y tampoco de la responsabilidad de mi defendido”. También pidió al Tribunal que lo declare inocente, pues aseguró que no hay pruebas en su contra.
Además, dijo que es contradictorio que Fiscalía mencione un perjuicio para el Estado, cuando el campo Singue está operando y generando ingresos económicos al país.
Lo mismo indicó la abogada del exministro Pareja Yannuzzelli. “Se demostró que el Estado no fue perjudicado con la explotación del campo petrolero. No hubo perjuicio y por lo tanto el delito no se configuró”, indicó la defensora. La abogada aseguró que Fiscalía no demostró que su cliente haya abusado de fondos públicos.
Escenarios para Jorge Glas
La resolución del caso Singue abre nuevos escenarios para Jorge Glas. El primero es que los jueces acepten la apelación y revoquen la sentencia a favor de los procesados, es decir lograr que el Tribunal los declare inocentes del delito. También puede ocurrir que los magistrados ratifiquen la condena en contra de las siete personas.
Si el Tribunal de Apelación ratifica la condena, los sentenciados aún pueden recurrir a la Casación. Esa etapa del proceso judicial sirve para que otros jueces analicen si se cometieron errores al dictar la sentencia.
Luego de que se resuelva la fase de Casación, la sentencia del caso Singue quedaría ejecutoriada. Ese hecho abre un nuevo escenario para el exvicepresidente.
¿Por qué?
Actualmente, Glas cumple una condena de seis años de prisión por el delito de asociación ilícita por la trama de corrupción de Odebrecht y otra de ocho años por cohecho en el caso Sobornos. Ambas penas están ejecutoriadas, es decir que jueces de tres instancias ratificaron las condenas.
Cuando la sentencia del caso Singue también quede en firme, la defensa de Glas podrá solicitar la unificación de penas.
El objetivo es que, al unificar las penas, Glas solo cumpla la condena más alta, es decir, la de ocho años por el caso Sobornos. De esa forma, podrá acceder a la prelibertad y salir de la Cárcel 4 de Quito, donde se encuentra recluido.
De hecho, la defensa ya ha solicitado en diferentes ocasiones la unificación de penas, sin embargo, esos pedidos fueron negados. El principal argumento de los jueces fue que Glas debía tener sus tres sentencias ejecutoriadas.
Por ejemplo, el 7 de enero del 2022, una magistrada negó la solicitud de unificación de penas, porque el exalto funcionario del correísmo tiene una sentencia de ocho años por peculado, en el caso Singue, que aún no está en firme.