Los jueces de la Corte Nacional de Justicia, Édgar Flores y Luis Enríquez, respondieron a la sanción con destitución del Consejo de la Judicatura. Foto: EL COMERCIO
Para los jueces Édgar Flores y Luis Enriquez su destitución obedece a una decisión política. La mañana de este miércoles 2 de octubre respondieron a la sanción del Consejo de la Judicatura.
En una rueda de prensa realizada en la planta baja de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) dijeron que la destitución se la llevan como “una condecoración“.
Esto por haber actuado conforme a las leyes y Constitución al aceptar el pedido de arresto domiciliario de parte de la defensa del exsecretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, en el marco de las investigaciones por el caso Sobornos 2012-2016.
La sanción que tomó la Judicatura la víspera se basa en lo establecido en el artículo 108 y 109 del Código Orgánico de Función Judicial.
En esa normativa se menciona que los magistrados incurrieron en faltas graves y gravísimas.
Según la Judicatura, cometieron un acto de negligencia, al no fundamentar una resolución o sentencia y además vulneraron el derecho al debido proceso y a la seguridad jurídica.
El organismo inició una investigación administrativa el pasado 4 de julio del 2019. Ese día la fiscal General, Diana Salazar; el contralor, Pablo Celi; y el delegado de la Procuraduría del Estado, Marco Proaño, presentaron una queja contra los jueces Flores y Enríquez y pidieron su destitución.
Para Flores, esto obedece a una intención de “tomarse la Corte Nacional“. Del mismo modo, Enríquez señaló que se busca tener “jueces timoratos“.
Ambos presentarán una reconsideración a la Judicatura y también acudirán a instancias internacionales para exponer su caso.
En la rueda de prensa negaron ser jueces “correístas” y enumeraron casos en los que sentenciaron o solicitaron investigar a exfuncionarios del anterior gobierno.