Una delegación huaorani de la Asociación Ome Yasuní dio a conocer el contenido de la carta que ayer dirigió al presidente de la República, Rafel Correa. Lo hizo en una rueda de prensa en la oficina de la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos, en Quito.
En la carta se hace una serie de pedidos para que el Estado respete su derecho de vivir de acuerdo a la cultura de las familias huaoranis que habitan la Zona Intangible del Parque Nacional Yasuní, entre Pastaza y Orellana, en la Amazonia.
Penti Baihua, presidente de la Asociación, solicitó al Presidente que se les entregue un título de propiedad de alrededor de 758 hectáreas, en donde viven huaoranis contactados, en la comunidad de Bameno, y familias no contactadas como los tagaeri, taromenane y dubakaeri.
“Queremos vivir en paz, sin petroleras ni militares; en medio de la naturaleza como nuestros antepasados”, indicó el dirigente.
Acompañado de Tipaa Quimantare, de la comunidad quien está a cargo del cuidado de la niña tagaeri que sobrevivió a la matanza de marzo del 2013, Baihua explicó que ella se encuentra en buen estado de salud.
Ahora, los huaoranis esperan que el Presidente les reciba en audiencia y les permita exponer sus argumentos.