La medida busca combatir la inseguridad en el país. El Gobierno ensayará desde el viernes una restricción a la venta de bebidas alcohólicas.
Los ministros de Gobierno, Gustavo Jalkh, y de Turismo, Freddy Ehlers, suscribieron ayer un acuerdo para establecer límites en los horarios de comercialización. Solo se permitirá el expendio de lunes a sábado.
Los locales de abarrotes, tiendas, comisariatos y licorerías solo podrán vender el producto hasta las 22:00 en esos días.
Mientras que para las discotecas, peñas, salas de banquetes, centros y complejos convencionales hay dos cronogramas: de lunes a jueves se permitirá la venta hasta las 24:00. El viernes y el sábado el horario se extenderá hasta las 02:00 (ver recuadro).
Ehlers aseguró que, con base en el acuerdo, desde este fin de semana los domingos ya no se podrá comercializar licor en ningún local que sea “regulado por los ministerios de Turismo y Gobierno”. La lista incluyes estadios, centros deportivos y sitios donde se realizan actos públicos gratuitos o también con fines benéficos.
Según Jalkh, el consumo de bebidas alcohólicas es un detonante para el cometimiento de delitos. “Las consecuencias del consumo excesivo de alcohol no son un secreto. Están fuertemente vinculadas con hechos generadores de violencia a todo nivel”.
Cuando menos en el 10% de los homicidios cometidos en Guayaquil -agrega- hubo una relación directa con el licor.
Durante el 2009, la Dirección Nacional de la Policía Judicial conoció 149 homicidios en Guayas. De ese total, 90 fueron denunciados en Guayaquil.
A partir del 16 de julio también se prohibirá en el país “la comercialización de cualquier tipo de bebidas alcohólicas en autoservicios ubicados en las estaciones de servicio y de distribución de combustibles”. Asimismo, se impedirá la venta en casinos y salas de juego (bingo-mecánicos).
Los operativos de control estarán a cargo de las intendencias, con el apoyo de la Policía. Quienes no cumplan con lo determinado se expondrán a sanciones que pueden ir desde una multa, hasta la clausura temporal o definitiva del negocio.
Solo el Ministerio de Turismo tiene registrados 12 000 establecimientos sujetos a regulación en el país. ¿Cómo se logrará hacer un control efectivo si la Policía y las intendencias no cuentan con el personal y los recursos suficientes para abarcar ese universo?
Jalkh fue enérgico al responder: “créame que se controlará. Cuando se declare la ley seca se entrará a los negocios y se sancionará a las personas que vendan y consuman licor. La ciudadanía también tiene que poner su parte para garantizar más seguridad”.
La medida abarca a los consumidores. Desde el viernes estará prohibido ingerir licor en espacios públicos, como parques o esquinas. “Las personas que se encuentren consumiendo bebidas alcohólicas en la vía pública serán sancionadas con prisión correccional de hasta cuatro días”.
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