Ecuador ha invertido 110 millones de dólares en un proceso de reforma de la justicia iniciado hace seis meses, en el marco del cual fueron terminadas 1,7 millones de causas pendientes, informó este lunes el órgano a cargo de la reestructuración.
Ese monto representa 94% de la partida asignada para 2011, dentro de un presupuesto total de casi 596 millones de dólares que debe ser ejecutado antes de 2014, dijo Paulo Rodríguez, presidente del Consejo de la Judicatura de Transición (CJ), en rueda de prensa.
El CJ está al frente de la reforma impulsada por el presidente socialista Rafael Correa, y aprobada en referéndum en mayo, para modernizar el sector y combatir la impunidad, aunque la oposición asegura que el objetivo del mandatario es controlar la justicia.
La entidad, conformada por tres delegados del gobierno, el Congreso y el Consejo de Participación Ciudadana, terminará su gestión en enero de 2013. El proceso es asesorado por una veeduría internacional encabezada por el juez español Baltasar Garzón.
Del presupuesto ejecutado en 2011, 41,2 millones de dólares fueron destinados a infraestructura tecnológica, destacó Rodríguez, para quien esa inversión permitirá que el sistema judicial cuente con “el mejor centro de datos” disponible en el país.
Según el funcionario, la reforma también ha permitido dar por terminados 1,7 millones de procesos pendientes, de un total de 2,6 millones inventariados al inicio del proceso, que prevé además obras de infraestructura y el aumento del número de jueces.
El pasado jueves el CJ posesionó a los nuevos magistrados de la Corte Nacional de Justicia (CNJ, suprema), tras un concurso público y de oposición, mientras que está en marcha una evaluación de todos los funcionarios del sector.