J.H. Glas Viejó llegó a Ecuador, tras su expulsión de Paraguay, donde permanecía bajo situación de irregular, para que prosiga con el proceso penal que la Fiscalía le sigue por el delito de violación a una menor de edad. La Fiscalía señaló la tarde de este miércoles 14 de mayo, en un comunicado, que está a la espera de que el juez que lleva la causa legalice la detención, para luego remitir el expediente a sorteo, para que lo conozco un tribunal penal, el que a su vez deberá ventilar el juicio.
El fiscal general Galo Chiriboga recordó que debido a que Glas Viejó había salido del país, pese a que sobre él pesaba una orden de detención, la Fiscalía solicitó (a la Interpol) “se eleve a alerta roja internacional para definir su detención, la cual fue cumplida”.
El proceso está a cargo de la fiscal de la Unidad de Violencia Sexual Miriam Moncayo. Según la Fiscalía, el procesado arribó al país el mediodía de este miércoles 14 de mayo en un vuelo chárter, “con estrictas medidas de seguridad”. Luego fue conducido al Hospital de la Policía, ubicado en norte de la urbe, “para valorar su estado de salud y confirmar si puede ser trasladado al Centro de Privación de Libertad Zona 8 (conocido como Penitenciaría del Litoral)”.
En la casa de salud de la Policía no se dieron detalles sobre el estado de salud del procesado, ni cuánto tiempo permanecería allí. Al área de Emergencia ingresaron cinco ambulancias, desde las 15:00 hasta las 18:00.
Glas Viejó está acusado de la violación de una menor que habitanba en un sector del norte de Guayaquil. La menor tenía 13 años por entonces. La víctima, quien quedó embarazada, entabló además una demanda de paternidad contra el acusado. Para emitir su dictamen acusatorio, la Fiscalía presentó como evidencias del delito el testimonio de la menor, la valoración psicológica, y el testiminio del médico que le practicó el reconomiento médico.