La Policía investiga si una organización vinculada con el narcotráfico estaría relacionada con el hallazgo de tres víctimas descuartizadas en sectores del noroeste de Guayaquil. Solo uno de ellos ha sido hasta el momento identificado, se trata de un joven de 17 años.
Los restos de extremidades seccionadas fueron descubiertos en barrios urbano marginales de la urbe entre el 19 de diciembre y el 1 de enero pasado. El último cuerpo, de un hombre adulto, había sido cortado en 14 secciones, y arrojado en dos sacos de yute, en dos sectores diferentes de la urbe. Estos fueron hallados por vecinos el 30 de diciembre y el 1 de enero pasados.
El informe forense determinó que los 14 restos fueron cortados con una herramienta similar a la usada para seccionar el primer cuerpo hallado.
Marcelo Tobar, jefe de la Policía Judicial del Guayas dijo ayer que no descarta la vinculación del narcotráfico en las muertes. Añadió que la familia del joven de 17 años, cuyo cuerpo fue hallado en el sector Nueva Prosperina, se ha negado a colaborar con las investigación.
La Fiscalía indaga a su vez una posible vinculación entre las muertes. El fiscal del Guayas, Antonio Gagliardo, conjeturó que debido al uso de una misma herramienta para ejecutar los cortes, podría tratarse del mismo victimario.
Hasta ayer se desconocía la identidad de dos víctimas. La Policía no ha podido dar con la identidad porque los cuerpos carecían de la cabeza y tronco. La identificación se realizará a través del cotejamiento de las huellas dactilares.