En una unidad judicial de Carchi se instaló, este 2 de julio del 2021, la audiencia de formulación de cargos en contra de un militar en servicio pasivo. La Fiscalía lo señala por el presunto delito de ejecución extrajudicial, que se habría perpetrado en 1990, en la localidad de Tufiño, una parroquia de Tulcán.
Ese ilícito es sancionado con cárcel de 22 a 26 años según el artículo 85 del Código Integral Penal (COIP).
Según las pesquisas, el 26 de noviembre de 1990, cerca de las 11:00, la camioneta, que conducía un hombre llamado Gilberto Tapia, perdió los frenos a la altura del destacamento militar del Batallón de Infantería N°39 Mayor Galo Molina.
El vehículo se chocó y destruyó parte de la estructura exterior de ese recinto. El militar, que ahora es investigado, era entonces el jefe de ese destacamento. Él junto con otros soldados dispararon contra la camioneta y el conductor. Tapia recibió un impacto de bala en la cabeza y murió
La investigación previa en este caso inició con un informe de la Comisión de la Verdad. Según la Fiscalía ha recabado “suficientes elementos de convicción” para procesar al militar en servicio pasivo.
La Fiscalía indicó que el delito de ejecución extrajudicial, según el Derecho Internacional Penal, es una grave violación a los derechos humanos.