Con el reconocimiento del lugar a través del registro fotográfico de los daños ocasionados por la explosión sucedida la mañana de hoy en las instalaciones del Grupo de Intervención y Rescate (GIR), en la Escuela Superior de Policía (Espoli), ubicada en Pusuquí, en el noroccidente de Quito, se inició la investigación de las causas de la detonación. Así lo anunció el fiscal Galo Chiriboga Zambrano mientras visitaba la locación donde ocurrió el incidente.
“Espero que podamos tener pronto los resultados de qué fue lo que pasó y sobre esa base, revisar protocolos nacionales e internacionales que nos permitan reconstruir esto con más seguridad”, dijo Chiriboga.
En un comunicado enviado por la Fiscalía se determina que los peritajes para determinar lo que originó el fuerte estallido durarán entre 30 y 60 días.
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La investigación está a cargo de cinco equipos de la Policía Judicial y será coordinado por Pablo Santos, de la Unidad de Delitos Flagrantes.
Según primeras informaciones del Centro de Operaciones de Emergencia zonal (COE) no existen víctimas humanas.
El boletín difundido por la Fiscalía señala que la onda expansiva afectó hasta 500 metros a la redonda, siendo el monte Casitagua el que recibió la mayor parte del fuego. Edificios civiles aledaños a la institución policial también sufrieron daños.
Según una primera evaluación realizada por el Centro de Operaciones de Emergencia, (COE) zonal, difundida por el Municipio de Quito, no existen pérdidas humanas. Además, se evacuaron a cerca de 150 niños de las escuelas ubicadas al frente del cuartel y se atendieron en la Escuela Superior Militar a 106 niños con heridas leves.
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