La madre de Carolina Garzón y su familia espera en las afueras del centro cultural Nina Shunku. Foto. Javier Ortega / EL COMERCIO
Desde las 18:45 de hoy, viernes 13 de marzo, agentes de la Fiscalía y de la Dinased reconstruyen las últimas horas de Carolina Garzón, antes de su desaparición el 28 de abril del 2012.
Los investigadores iniciaron la diligencia en el centro cultural Nina Shunku, ubicado en el sector de La Ronda, en el centro de Quito. En este local, la joven colombiana pasó la noche del 27 de abril del 2012.
Por ahora la diligencia judicial es reservada y no se permite el ingreso a la prensa. Policías de la Unidad del Mantenimiento del Orden (UMO) resguardan el acceso al centro cultural.
Organizaciones de Derechos Humanos, entre estos Inredh, cuestionan que no se les permita el ingreso al local.
“Hemos venido acompañando este proceso y como organismo de DD.HH. lo que pretendemos es mirar que el debido proceso se cumpla. No nos interesa difundir lo que aquí ocurra. Nos ha preocupado la falta de visión técnica en las dos primeras reconstrucciones”, comenta Luis Ángel Saavedra, director de Inredh.
La madre de Carolina Garzón, Alix Ardila, mantiene la esperanza de que estas diligencias arrojen algún resultado y se pueda localizar a su hija.
La mujer recuerda los días exactos que han pasado desde aquel 28 de abril del 2012. “Son 1054 días de permanente desesperación“, dice Ardila. Ella permanece con su familia en los exteriores del centro cultural.
La diligencia está prevista que se extienda hasta la medianoche. Cinco extranjeros (dos argentinos y tres colombianos) forman parte de la reconstrucción.
Mañana, a partir de las 09:00, iniciará una segunda reconstrucción en el barrio Paluco, en el centro oriente de Quito, lugar donde fue vista por última vez la joven colombiana.