Cuatro ciudadanos paquistaníes pasaron más de 43 horas en el aeropuerto Mariscal Sucre. No estuvieron detenidos, pero tampoco les permitieron ingresar a Ecuador.
Migración los excluyó, porque habían arribado sin visa, así que esperaron en la terminal aérea de Quito a que hubiera un vuelo para regresar a su último puerto de embarque, en Brasil, como establece la ley migratoria.
T. D., de 37 años; Q. M., de 71; A. S., de 21, y M. S., de 23, pasaron las madrugadas del miércoles y de ayer en la zona de preembarque. Al mediodía de ayer volvieron a Brasil.
El lunes, la Cancillería ecuatoriana impuso el visado a ciudadanos de nueve países: Afganistán, Bangladesh, Eritrea, Etiopía, Kenia, Nepal, Nigeria, Pakistán y Somalia. La medida se tomó para evitar que Ecuador se convierta en país de paso para personas que intentan llegar de forma ilegal a otros destinos.
El 25 de agosto, el paquistaní Abbas F. fue detenido e identificado por la Policía como responsable de traer de manera ilícita a ciudadanos de su país. Según los agentes, ofrecía documentos ‘legales’ para, posteriormente, llevarlos a Estados Unidos y a Europa.