La presencia del asesor presidencial Mario Latorre fue rechazada ayer por los ex combatientes del Cenepa en la Plaza de la Independencia, Centro de Quito.
El funcionario trató de hablar con los uniformados, pero ellos se negaron a hacerlo. “Queremos dialogar con el Presidente. Hemos conversado con los delegados durante un año y nos han engañado”, replicaron los militares, mientras en la Plaza se preparaba la ceremonia para el relevo de la Guardia Presidencial.
Desde las 06:00 de ayer, cerca de 150 uniformados se congregaron frente al Palacio de Gobierno para protestar por el listado de beneficiarios de la Ley de Héroes y Heroínas. Los militares, vestidos con trajes de camuflaje verde, gritaban consignas en contra de la lista elaborada por el Ministerio de Defensa: “¡Listado manipulado! ¡ni un paso atrás!”. En sus carteles rezaba: “Señor Presidente: exigimos respeto. No somos unos cuantos panzones”.
Cuando comenzó el cambio de la Guardia Presidencial, los uniformados se callaron y guardaron las pancartas. El acto fue presidido por el vicepresidente de la República, Lenín Moreno. En medio de la ceremonia, a través de los altoparlantes, fueron recordadas, como cada lunes, las batallas de 1829, 1941, 1981 y 1995. Los ex combatientes gritaron “¡Vive! al escuchar “guerra del Cenepa”.
El vicepresidente Moreno solo los regresó a ver y aplaudió. Luego levantó el brazo y desapareció del balcón de Carondelet.
Pese a que al principio se negaron a dialogar con Mario Latorre, un grupo de militares, dirigentes de la Asociación de ex combatientes del Cenepa, se reunió con él y la viceministra de Defensa, Rosa María Pérez, para tratar el tema de la lista de beneficiarios de la Ley de Héroes y Heroínas. El encuentro se realizó en el Salón Azul del Palacio de Gobierno.
Pérez les dijo que existe la predisposición de atender los pedidos de los uniformados. Pero no hubo acuerdos. Al final de la cita, el presidente de la Asociación de ex combatientes del Cenepa, Juan Llasha, se dirigió a los manifestantes de la Plaza Grande desde el atrio de La Catedral.
Por la tarde, los soldados instalaron carpas de tipo militar. Decían que si habían aguantado en la guerra, nada les impedirá estar allí hasta dialogar con el Presidente.
“Permaneceremos aquí. La convicción es que nuestra comisión se reúna directamente con el presidente Correa. En un año no han parado las acreditaciones”, dijo el militar, en referencia a los 1 402 beneficiarios, quienes -según la Ley- tendrán derecho a una vivienda, pensión, beneficios educativos y de salud, etc. Los ex combatientes piden que se considere el Parte de Guerra de 1995.
Este refiere que 5 481 personas actuaron en el conflicto: 3 171 voluntarios (tropa), 839 conscriptos, 788 reservistas, 377 oficiales, 246 aspirantes, 28 voluntarios en servicio pasivo, 26 funcionarios civiles, cinco cadetes y un civil.
El pedido específico de los ex combatientes es que la Ley de Héroes sea derogada definitivamente si ninguno de ellos va a ser reconocido. “No podemos ser cómplices de héroes falsos”, dijo Llasha.