Licia Casares. Coordinadora barrio La Mariscal
La representación de las ciudades son los espacios públicos, pero la delincuencia se apodera de los que se encuentran abandonados por la ciudadanía.
Las personas son asaltadas o robadas en parques y plazas que han sido descuidados por nosotros. Frente a esta problemática los moradores de cada barrio deberían unirse y organizarse para empoderarse de estos espacios que son de uso ciudadano.
La recuperación se debe dar mediante actividades que ayuden a los moradores de cada barrio a integrarse y a conocerse.
El barrio La Mariscal ha realizado eventos culturales para que los vecinos generen una conciencia colectiva de solidaridad. Esta unión se ha fomentado en todos los actores que están en el sector: colegios, universidades, locales comerciales, etc. De esa manera se van reduciendo los asaltos en los alrededores del barrio y en las calles.
Vencer el miedo es lo más difícil, pero con una coordinación entre todos se puede conseguir que la delincuencia se reduzca. La colaboración de la Policía es fundamental para el control, pero las soluciones deben salir de la comunidad.