Las plazas de San Francisco y Santo Domingo; los accesos a 4 centros comerciales del ahorro; el parque El Ejido, y la ruta entre estos puntos fueron los improvisados escenarios de un performance (muestra escénica) de defensa de la libertad sexual en el fútbol, tras una decisión judicial.
Con megáfono en mano, un redoblante y una pequeña pelota, las integrantes del equipo Guipúzcoa Saltamontes de Venus, que en julio del 2009 fueron expulsadas de la Liga Parroquial La Floresta, buscaron concienciar a la ciudadanía.
Con ‘La picadita del piquito’, como se denominó la muestra, las jóvenes demostraron que “somos lesbianas y que tenemos derechos”, dice Karen Barba, del club. Según la mediocampista, la marcha buscaba garantías para volver a jugar fútbol en La Floresta. “Queremos que nos protejan mientras participamos. No queremos ser víctimas de actitudes lesbofóbicas y, si las hay, que se sancione”.
El último miércoles, el Juzgado Cuarto de Garantías Penales de Pichincha falló a favor del club Guipúzcoa, al dejar sin efecto la sanción impuesta por la Liga Parroquial La Floresta.