Entrevista a Edgar Aguayo, gerente de la Cámara de Comercio de Esmeraldas. Foto: Cortesía
Entrevista a Edgar Aguayo, gerente de la Cámara de Comercio de Esmeraldas.
¿La violencia que se vive en la frontera norte ha afectado a los comerciantes de Esmeraldas?
Claro que sí. Es lamentable la situación que estamos viviendo los comerciantes. El miedo que tiene la gente ha hecho que ya no vengan a la provinciay por lo tanto el volumen de venta se ha reducido en un 40%. La violencia está acarreando consecuencias, porque la única actividad que genera trabajo en la provincia es el comercio. Aquí no hay grandes grupos empresariales. Aquí se vive del turismo y del microempresario.
¿Qué tipo de comercio es el más afectado?
El comercio diario. La persona que vende textiles, zapatos, comida. Al no haber turismo, no hay venta. Esmeraldas está al borde de la quiebra. Si el Gobierno no inyecta liquidez a la economía de la provincia no sé qué pasara.
¿A qué se refiere con inyectar liquidez a la economía de Esmeraldas?
El Gobierno debe dar préstamos a los comerciantes, pero estos créditos deben ser cómodos. Si no se toman acciones en la provincia, la desocupación va a crecer. No es culpa de nosotros el problema de la frontera.
El Gobierno ha dicho que en las provincias fronterizas, entre ellas Esmeraldas, se va a emprender programas para el desarrollo social y económico. ¿Ustedes ya se han reunido con autoridades del Estado para conocer esos proyectos?
No. Se ha hablado de un plan de reconstrucción. Se ha analizado un plan de ayuda económica para la reactivación de la provincia, pero hasta el momento no funciona nada. Todo se está analizando y esperamos que sea una realidad, pero hasta ahora no se concreta nada.
¿Qué hacer para salir de esta situación?
Poner seguridad, reactivar la pesca, la agricultura, apoyar a los emprendedores. Generar fuentes de empleo. Los jóvenes no tienen opciones.
La violencia en la frontera ocurre a partir de enero con la explosión del coche bomba en San Lorenzo, ¿ustedes conocían algo sobre la existencia de estos grupos armados?
Nosotros desconocíamos de esta situación. Aparentemente vivíamos en una provincia de paz. No sabíamos que había grupos armados. Para nosotros es una sorpresa cada vez que aparecen noticias de secuestros y ataques de estas agrupaciones.
En San Lorenzo y Eloy Alfaro, los dos cantones que se encuentran en estado de excepción, existen un amplio cultivo de palma. ¿Esa actividad también se ha afectado?
Ese sector también está afectado y no solo en esos cantones. En Quinindé también hay palmiculturas. En esa zona se habla de la existencia de guerrillas y grupos armados y eso es grave. Pero la gente debe conocer que la violencia de Mataje está a cinco horas de Esmeraldas (ciudad). No conocer esto ha hecho que el turismo en las playas se afecte.