En la Asamblea. Alexandra Córdova (c), madre de David Romo, desaparecido hace seis años, presentó este jueves 16 de mayo del 2019 con miembros de Asfadec el Proyecto de Ley Orgánica para la Búsqueda, Investigación y Localización de Personas Desaparecidas. Foto: EduardoTerán / EL COMERCIO
Siempre lleva en sus manos la foto de su hijo, David Romo Córdova, desaparecido hace exactamente seis años, el 16 de mayo del 2013. Lo último que se supo del joven estudiante fue que salió de la Facultad de Comunicacion Social de la Universidad Central para dirigirse a su casa, en la Mitad del Mundo, en el norte de Quito.
Alexandra Córdova no suelta el cartel, que anuncia una recompensa de USD 200 000 por información de David. “El día de hoy, justamente jueves, 16 de mayo del 2013, hace seis años desapareció David Romo Córdova, mi hijo, sin que hasta el día de hoy el Estado nos de una respuesta cierta, verdadera de qué fue lo que ocurrió y dónde está mi hijo.
“A lo largo de estos seis años, lo único que se ha podido ver son la negligencia y las omisiones del Estado en conjunto con sus funcionarios, servidores públicos e instituciones en la investigación, búsqueda y localización de personas desaparecidas”, denuncia Córdova este 16 de mayo del 2019, en los exteriores de la Asamblea Nacional, junto a los parientes de otros desaparecidos, con quienes se encuentra para presentar el Proyecto de Ley Orgánica para la Búsqueda, Investigación y Localización de Personas Desaparecidas.
Plantón de Asfadec este jueves 16 de mayo del 2019, durante la presentación del Proyecto de Ley Orgánica para la Búsqueda, Investigación y Localización de Personas Desaparecidas.. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
La propuesta legal -acota la madre de David Romo- busca tipificar la desaparición voluntaria como un delito. “Hace 31 años fue el caso de los hermanos Restrepo, 30 años tuvieron para cambiar el aparataje estatal en cuanto a investigación, búsqueda y localización de personas desaparecidas. Pero ese cambio no se ha dado, esa es una grave omisión del Estado”, sentencia Alexandra Córdova, acompañaban de representantes de la Asocación de Amigos y Familiares de Desaparecidos (Asfadec).
Los familiares coinciden que el trabajo realizado por la Fiscalía y la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased) de la Policía es deficiente en la búsqueda de los desaparecidos. Consideran necesario contar con un marco normativo acorde a los requerimientos de los allegados de personas desaparecidas.
“El Estado está encargado de precautelar la seguridad y vida de sus ciudadanos y sobre todo de honrar todos esos tratados internacionales, que no lo ha hecho, caso contrario nuestros hijos, nuestros familiares, estuvieran ya encontrados con investigaciones ágiles y efectivas. Ágiles en el tiempo. No puede ser que seis años después yo continúe buscando a mi hijo y que ese mismo drama lo vivan miles de personas que aún continúan desaparecidas y sus familias estamos aquí para exigir esa verdad, esa justicia, con hechos ciertos”, dice la madre de David.
“Aquí en nuestro país no puede desaparecer una sola persona, peor más de 1 500 personas, según las últimas cifras… Venirnos a decir 1 500. Una sola persona debiera ser un problema para el Estado. El hecho de que existan ahora 1 500 y ya no 4 000 como habían en las cifras anteriores no me habla de que el Estado es efectivo, me habla de que sigue habiendo omisiones, negligencias y falta de preparación en sus funcionarios”.
“Deben prepararse, no solamente en técnicas de investigación, sino en derechos humanos. Claro, las autoridades nos hablan de que están preparados en DD.HH., pero eso no es así. El hecho de que en el caso de mi hijo un funcionario de la Comisión de la Verdad, para demostrar su teoría, me llevó al camal metropolitano a faenar un cerdo, a cortarlo en pedazos para con eso demostrar que mi hijo fue asesinado, que fue incinerado, eso me habla de una persona que desconoce de DD.HH., una persona que se ha burlado de nosotros”, dijo Alexandra Córdova.
Los dirigentes de Asfadec tenían previsto reunirse con la asambleísta Lourdes Cuesta. A ella le expondrán sus inquietudes a nombre de las 1 500 personas desaparecidas en Ecuador que no han sido localizadas, según los registros de Asfadec.
Isabel Cabrera, presidenta de esa organización, insistió en que los investigadores deben recibir una mejor preparación. Asegura que allí receptan nuevos casos de forma constante y les apoyan en lo emocional y jurídico para que se sepan desenvolverse al momento de presentar su denuncia.