Diez personas fueron detenidas el jueves 28 de febrero en Ecuador por su presunta implicación en el secuestro de un director provincial del Instituto Ecuatoriano de la Seguridad Social (IESS). Los perpetradores reivindicaron este acto en nombre del Frente 30, una de las disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
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Un operativo se desarrolló en las fronteras
Las detenciones se realizaron en un operativo simultáneo en tres puntos distintos de Ecuador: Quito, Tulcán, fronteriza con Colombia. Además, en la localidad de Arenillas, situada en la costa sur del país, cercana a la frontera con Perú.
En el operativo los agentes confiscaron una docena de teléfonos celulares cuya información almacenada será sometida a análisis.
El secuestro fue denunciado el 13 de octubre de 2024 por los familiares de la víctima, Carlos Escudero, entonces director del IESS en la sureña provincia andina de Loja, fronteriza con Perú.
Secuestro extorsivo
Los secuestradores decían pertenecer al Frente 30 y reclamaban 500 000 dólares para liberar a Escudero, quien finalmente fue liberado sano y salvo el 4 de noviembre. Esto luego de permanecer unas tres semanas cautivo por un grupo desconocido.
Desde inicios de 2024 Ecuador se encuentra bajo el “conflicto armado interno” declarado por el presidente, Daniel Noboa, contra las bandas del crimen organizado. Estos grupos son los causantes de la escalada de violencia que llegó a situar en 2023 a Ecuador a la cabeza en índice de homicidios en Latinoamérica.
Contra estas bandas criminales se ha decretado también una serie de sucesivos estados de excepción para enfrentar con militares a la criminalidad. Esto incluyó la militarización de cárceles controladas por estos grupos delictivos.
