Los afectados por la supuesta estafa accedían a firmar contratos de la venta de sus automotores, tras el ofrecimiento de ser contratados para brindar servicios a una empresa. Foto: Imagen referencial Archivo/ EL COMERCIO
Una supuesta estafa fue denunciada la mañana de este viernes 1 de julio del 2016 por el abogado de 12 presuntas víctimas. Los afectados ofrecían sus vehículos para que fueran utilizados por una compañía a cambio de comisiones. Al final, los propietarios dicen que no volvieron a ver sus automotores.
Según Stalin López, abogado de los denunciantes, los acusados al parecer proponían que los autos sean utilizados en actividades de empresas y que a cambio existiría una paga mensual.
El problema apareció porque durante el proceso, las víctimas aparentemente firmaron contratos de compra venta, bajo el argumento de que en caso de que los vehículos sufrieran algún daño, los contratantes podrían hacerse cargo de los daños.
Una vez que las víctimas habrían accedido a entregar sus automotores, los contratantes se quedaron con estos, incluso con la venta a terceros.
José A. narra que se contactó con unas personas tras ver un anuncio publicitario. Recibió fotos de las empresas a las que su vehículo brindaría servicio y se ilusionó porque pensó que de esta forma obtendría ingresos rápidamente.
José entregó el vehículo y le dijeron que en seis meses podrían incluso comprarle su automotor, pero era necesario que firmara un contrato. Él accedió al pedido, pero nunca recibió ganancias mensuales ni volvió a recuperar su vehículo.
Según López, esta aparente modalidad de estafa empezó a operar en Quito desde el 2015 y en los últimos meses los casos se han hecho más conocidos.
La empresa a la que se está demandando por esta modalidad no se pronunció sobre el caso. En las instalaciones afirmaron que su propietaria se encontraba de viaje. Actualmente, el proceso está en etapa de indagación previa.