Los resultados de la investigación son contundentes. El Informe de Estrategia Internacional de Control de Narcóticos difundido por EE.UU. revela que Ecuador “es un país importante en el tránsito de cocaína y heroína”. Al menos 220 toneladas métricas transitan por el Ecuador cada año, de las cuales un 60% se va a los mercados de EE.UU y el resto para Europa.
Según ese documento, los narcotraficantes explotan las regiones fronterizas y las rutas fluviales y marítimas “que resultan difíciles de monitorear”. El documento señala que en Ecuador los controles limítrofes son “débiles y evadidos frecuentemente, pero van mejorando gradualmente”.
Las deficiencias operativas han sido reconocidas por oficiales de la Policía. En abril pasado, el entonces director de Antinarcóticos de Pichincha, Fernando Correa reveló la falta incluso de vehículos para operar en la ciudad. “Nunca hemos tenido algo extraordinario. Si hablamos de tecnología de punta, no la tenemos. Carecemos mucho de medios técnicos”.
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Algo similar ocurre con el grupo Gema que opera en San Lorenzo, un cantón fronterizo de Esmeraldas. Los agentes advierten que hasta diciembre pasado eran 40 hombres y que hoy son 11.
Es más, no se dedican solo a operaciones antidrogas, sino también al control de armas en la ciudad y a llamados de auxilio.
En medio de estos hechos, ayer se conocieron cifras elevadas en cuanto al decomiso de alcaloides en el país. Entre enero y este mes se han decomisado 21,2 toneladas. Es decir, apenas cinco menos que el año pasado, cuando se detectaron 26 toneladas.
Los 664 operativos realizados por Antinarcóticos en Guayas en el primer semestre de este año se tradujeron en el decomiso de 10,8 toneladas de droga.
Los operativos condujeron a la detención de 550 personas.
¿Las altas cantidades de cargamento ilegal decomisadas es por la eficiencia policial o porque las redes utilizan más a Ecuador? Wladimir León, jefe de Antinarcóticos del Guayas, cree que eso responde a los mayores controles en lugares desde donde se intenta enviar la droga al exterior.
El último informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) revela que Ecuador es el tercer país del mundo con mayores decomisos de cocaína en el mundo (el 9% de droga), solo por debajo de Colombia (35%) y EE.UU. (15%).
En los últimos cinco años, la Policía Antidrogas de Ecuador se incautó de 179,6 toneladas.
A esto se suman las nuevas formas en que operan las mafias. El denominado ‘gancho ciego’ es una de ellas. “Rompen los sellos de seguridad del contenedor, introducen las maletas con droga y sellan el contenedor de nuevo con sellos falsos”, explica León.
En menos de dos semanas, dos cargamentos de cocaína fueron descubiertos dentro de contenedores que arribaron a puertos europeos desde la Terminal Portuaria de Guayaquil.
El pasado 21 de julio se reportó en un puerto francés el hallazgo de 113 kilos de cocaína camufladas en un contenedor que, según las autoridades de ese país, habrían provenido de Ecuador.
Los alcaloides estaban ocultos en bolsas, dentro de un contenedor que transportaba productos, como latas de atún.
11 días después, un nuevo contenedor proveniente de Ecuador fue descubierto contaminado con 40,9 kilos de cocaína en el puerto de Bélgica. Del hallazgo del cargamento dio cuenta el pasado martes la Armada ecuatoriana. El contralmirante Luis Jaramillo, comandante de Operaciones Navales indicó que la droga se encontró en un contenedor dentro de un buque que partió de Ecuador. La carga estaba oculta en un envío de banano.