Alberto Daza Díaz, un hombre de 31 años sin antecedentes penales, fue asesinado a balazos la madrugada de este miércoles 22 de diciembre en su casa en el Guasmo Sur, en el sur de Guayaquil. Su hija, de solo 10 meses de edad, resultó herida.
La bebé terminó con un proyectil de bala en el pecho, a la altura de la clavícula. Mientras el hombre murió de inmediato a causa de seis disparos que le propinaron cuatro hombres que se movilizaban en dos motocicletas, según el parte policial del hecho.
Una vecina del sector de la Cooperativa Cristal del Guasmo llevó a la bebé en su vehículo hasta al Hospital del Guasmo, pero fue derivada en ambulancia al Hospital del Niño Francisco Icaza Bustamante.
Según los vecinos de la modesta vivienda, los asesinos ingresaron a la casa para acribillar a la víctima, quien trabajaba como peluquero, y había llegado tarde del trabajo. La Policía indaga el móvil del nuevo caso de sicariato.
En lo que va del año las muertes violentas bordean las 660 en la Zona 8, que integra los cantones Guayaquil, Durán y Samborondón, frente a las 358 muertes violentas registradas en el año 2020.
La mañana de este miércoles 22 de diciembre otro hombre de 25 años fue asesinado a tiros por sujetos en moto en la isla Trinitaria, a la altura del primer puente de la avenida Perimetral, en el suroeste del Puerto Principal.
Los menores de edad que han resultado víctimas colaterales de la violencia criminal se cuentan por decenas en lo que va del año en Guayaquil, entre heridos y muertos. Los Guasmos están entre los sectores con mayor incidencia reciente de este tipo de casos.
Un niño de 10 años resultó herido de bala el pasado 25 de noviembre cuando quedó atrapado con su madre en el fuego cruzado en una persecución policial en la cooperativa Juan Péndola del Guasmo. Dos adolescentes resultaron heridos en una balacera registrada el pasado 28 de noviembre en la cooperativa Venecia del Guasmo.