‘Apelaré si los acusados son absueltos’

En un medio se informó que el Tribunal II Penal de Esmeraldas emitió una sentencia mixta en el caso de narcotráfico Huracán de la Frontera, con acusados y absueltos. ¿Ya fue notificado?No conozco absolutamente nada. Lo que sé es lo que vi en la televisión, donde daban nombres y apellidos de posibles autores, cómplices y encubridores. Pero yo no tengo ningún tipo de notificación al respecto.

¿O sea que no hay todavía una sentencia judicial?

Así es. Pero si eso fuera verdad que hay acusados absueltos yo apelaré la sentencia de ese caso de narcotráfico. Todavía cuento con dos instancias más: la consulta a la Corte Provincial de Esmeraldas y el recurso de casación ante la Corte Nacional de Justicia.

Durante la investigación ¿se lograron recabar suficientes pruebas en contra de José Ignacio Chauvín y los hermanos Ostaiza Amay, inculpados en el proceso?

Si se confirma la versión periodística, quizás no fui lo suficientemente convincente para el Tribunal durante la audiencia de juzgamiento o quizás no cumplí con mi trabajo como debía.

¿Tenía pruebas fuertes?

Para mí, mi trabajo estuvo bien. Presenté las pruebas que tenía, que eran suficientes para condenarlos. Si otros piensan que eso no es suficiente, qué puedo hacer. Solo me queda apelar.

¿Cuántas pruebas existen en contra de los acusados?

El juicio consta de 120 cuerpos. Ahí están todas las pruebas, incluida la asistencia judicial que vino de Colombia, en la que se mencionan los correos entre Raúl Reyes y Chauvín.

La defensa de los hermanos Édison y Miguel Ostaiza Amay argumenta que no hay pruebas incriminatorias.

Eso es lo que dicen, pero ellos eran los representantes legales de la empresa Joammy Ema, que no tenía ingresos pero movía grandes cantidades de dinero, que no ha podido justificar. Por eso les abrieron una investigación por lavado de activos. Hay evidencias suficientes para indicar que estos ciudadanos se dedican al narcotráfico, con droga de las FARC.

¿Y cuál es la relación de Chauvín con los Ostaiza?

Se demostró que Ignacio Chauvín tenía reuniones secretas con Jefferson Ostaiza, inclusive cuando era Subsecretario de Gobierno. También le recomendó a su amigo Diego Benítez para hacer supuestos negocios petroleros.

Después de la desaparición de la UIES, ¿cambió en algo la cooperación gubernamental con la Policía para combatir el narcotráfico?

Disminuyó el aporte económico, pero los investigadores siguen siendo casi los mismos de la anterior unidad. Ahora no se puede comprar información como antes y eso repercute en el trabajo.

Pero ¿pagar por información es legal?

No es ningún pecado, porque está autorizado en el país.

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