Usando ejemplos de procesos penales archivados, 210 fiscales y 35 policías judiciales fueron capacitados durante dos días en Quito.
El objetivo fue actualizar sus conocimientos en materia de investigación criminal, estandarización de indagaciones en procesos penales y delitos informáticos.
“Cuando investigábamos un proceso, la Fiscalía y la Policía Judicial trabajaban por separado”, dijo el coronel Fausto Valle, director de investigación de la Fiscalía General. Aquello motivó a que se desarrollen estas charlas que contarán con la participación de 625 fiscales a escala nacional.
En la capacitación del pasados viernes y sábado participaron autoridades de Pichincha, Imbabura, Carchi, Napo, Orellana y Sucumbíos. En el discurso inaugural de la cita, el fiscal Galo Chiriboga manifestó que las capacitaciones se enfocan en mejorar los resultados de las investigaciones y la protección de las víctimas.
“El objetivo principal es que los fiscales y los policías judiciales trabajen de forma unificada en un proceso”, afirmó el teniente coronel David Proaño, quien asesora a la Fiscalía en los procesos investigativos. “Los fiscales son quienes dirigen una investigación pero deben saber cuáles son y de qué manera solicitan las pruebas a realizarse”, expresa Proaño y añade que no es lo mismo pedir una “prueba de uso de armas de fuego” a requerir una ‘prueba de restos de pólvora o de nitritos’, a los investigadores.
Guillermo Moreno, fiscal provincial de Napo, considera que esta actualización con las autoridades de la Policía Judicial es importante. A su parecer, antes eran comunes las violaciones a los protocolos investigativos por desconocimientos mutuos de la PJ o de la Fiscalía, “sin ninguna malicia”.
Se han desarrollado talleres de este tipo en Manta con fiscales de Esmeraldas, Manabí, Santo Domingo de los Tsáchilas y El Oro. En Cuenca se los realizó para jurisprudentes de Azuay, Cañar, Loja y Zamora. La próxima capacitación se dará en Guayaquil para fiscales de Guayas y Galápagos.